SUCESOS
Atacan la sede del PSOE para reivindicar la absolución de Pablo Hasél
La fachada amanece con hoces y martillos, pintura amarilla y una proclama en favor de la «absolución» del rapero. Daniel de la Rosa califica este acto como un "ataque directo a la democracia"
La sede del PSOE en Burgos, ubicada en la calle Vitoria, vuelve a ser objeto de actos vandálicos. En esta ocasión, la fachada ha amanecido con pintadas de ideología comunista reivindicando la absolución del rapero Pablo Hasél, recientemente encarcelado por «injurias a la Corona y enaltecimiento del terrorismo» a través de las letras de sus canciones y 64 mensajes difundidos en la red social Twitter.
Aparte de reclamar la «absolución» de Hasél, tal y como se puede apreciar en la verja de la puerta, los autores de esta acción también han pintado la hoz y el martillo en las paredes laterales de la sede. Además, han volcado pintura amarilla sobre el lema en el que se circunscribe la protesta.
Este acto vandálico ha sido calificado por el secretario de la agrupación local del PSOE y alcalde de Burgos, Daniel de la Rosa, como un "ataque directo a la democracia".
Cualquier ataque a cualquier sede de un partido político es un ataque directo a la democracia. Hoy nos ha tocado a los socialistas de Burgos. pic.twitter.com/pioRtNWNeP
— Daniel de la Rosa / ❤ (@danidelarosa)
Precisamente, ayer tuvo lugar en la Plaza Mayor una concentración de apoyo a Hasél, bajo el lema 'Amnistía total. Ser antifascista no es un delito', que se desarrolló de manera pacífica sin altercado alguno.
No es la primera vez que la sede del PSOE burgalés sufre actos de este tipo. El pasado mes de octubre, aparecieron pintadas nazis en la fachada. Concretamente, símbolos como la esvástica, la cruz gamada y dos proclamas claramente antisemitas: «traidores» y «juden raus» («judíos fuera»).
Nada más tener constancia de lo sucedido en aquella ocasión, la agrupación provincial socialista interpuso una denuncia ante la
Policía Nacional
, amén de manifestar su enérgica condena a este «ataque a la democracia», tal y como señalaba su secretaria general,
Esther Peña
, quien no dudaba en pedir «calma» tras
«u
na agresión de odio intolerable fruto de la campaña de crispación que sufrimos todos los burgaleses