Proyecto educativo cuidado al detalle para familias de Burgos

Como escuela inclusiva que cree, respeta y se adapta a la individualidad de cada alumno, el colegio Jesús María tiene en la elección de metodologías innovadoras, en la acción pastoral dinámica y en la prestación de servicios que hagan más cómoda la vida de las familias de Burgos.  

Así, siempre desde la familiaridad, cercanía y trabajo en equipo, al estilo de Claudina Thevenet, su fundadora, la comunidad docente acoge y respeta a cada persona desde las diferencias, practicando una pedagogía basada en el estimulo y la motivación desde que el niño tiene 1 año hasta la etapa de Educación Secundaria. 

Para ello se apoya en programas como Ludiletras, Entusiasmat, Science Bits, Aprendizaje Cooperativo, Proyecto de Interioridad o estimulación temprana, que contribuyen al desarrollo académico y personal de cada estudiante, mediante una actualización pedagógica constante.

Como centro con sección bilingüe inglés celebra semanas de inmersión lingüística y desarrolla talleres semanales con nativos y estancias en Hastings (Inglaterra). Además, en la ESO pueden realizar intercambios en habla francesa con jóvenes de Tours (Francia) y participar de un programa de conversación semanal con alumnos de otras nacionalidades. La visión internacional no se queda ahí y los alumnos tienen la opción de participar en el programa Erasmus+. 

La presencia de las nuevas tecnologías es una constante, y como prueba el centro posee la máxima certificación en Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC de la Junta de Castilla y León) y cuenta con la APP Educamos, una plataforma de comunicación y gestión que acerca el día a día a las familias de manera fácil y sencilla.

Por otro lado, la jornada continua permite ofrecer numerosas actividades extraescolares por la tarde, tanto deportivas como artísticas, de la mano de empresas reconocidas como Art-Terra, Educaingenio, Kids&Us, Master Chess, bfhBurgos o Sensateca. 

AMPLIO PATIO Y COCINA PROPIA PARA EL DESARROLLO DEL MENOR

Si importante es el proyecto educativo, también lo son las instalaciones. Jesús María cuenta con espacios deportivos cerrados entre los que destaca el nuevo aula de psicomotricidad y estimulación temprana o su amplio patio con nada menos que 45 árboles de 16 especies diferentes. Por no hablar de su huerto escolar, un proyecto ecológico interdisciplinar en el que se unen las matemáticas, las ciencias, la lengua o la educación plástica.

La comunidad educativa también piensa en las familias, con un estrecho contacto con la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) así como con numerosos servicios de uso diario, mensual o anual como madrugadores con desayuno, continuadores, comedor con menús elaborados en la cocina del centro, campamentos urbanos en julio o guardería en reuniones.

La reconocimiento de las familias con el centro se constata a través de encuestas anuales de satisfacción; en este curso tan particular, son numerosas la muestras de confianza ante las medidas preventivas de organización y seguridad adoptadas por el centro tales como la toma de temperatura diaria en el aula, la medición de CO2 desde octubre para la correcta renovación del aire o el seguimiento de las clases vía telemática desde el primer día del curso académico ante confinamientos individuales.