COLEGIO LICEO CASTILLA
Educando futuro, educando ciudadanos que ecolorean el mundo
El Colegio Liceo Castilla apuesta por una educación basada en la atención constante y personalizada de los alumnos, con valores como la solidaridad y la tolerancia como piedra angular y la familia como factor vertebrador esencial para la formación de los ciudadanos del futuro. El equilibrio entre innovación y tradición es el motor de su pedagogía y metodología
Si por una cosa se caracteriza el Colegio Liceo Castilla es por buscar no solo la excelencia educativa, que también, sino la formación integral de personas con inquietudes, que sean capaces de transformar el mundo en el que viven desde la responsabilidad y la creatividad.
Esta manera genuina de educar se vive en las aulas de una manera intensa, aunque este año toque mascarilla, desde los más pequeños de primero de infantil hasta los mayores de segundo de bachillerato, con proyectos y programas educativos adecuados a cada nivel y en los que se implican tanto las familias como el profesorado de una manera activa.
Uno de esos programas educativos pioneros en la región y que se ha consolidado como pilar del centro es Talentia for the World. En él se engloban diversos proyectos educativos originados en las aulas de entre 3º de la ESO a 2º de Bachillerato con alumnos de alto rendimiento académico.
Gracias a esta iniciativa los escolares tienen la oportunidad de colaborar con instituciones como Centro de Referencia Estatal de Enfermedades Raras (CREER), con diferentes actividades que fomentan la inclusión social de las personas con este tipo de patologías, o el Hospital Universitario de Burgos (HUBU).
Precisamente en el complejo asistencial burgalés un grupo de alumnos de bachillerato biológico del programa ‘MIR de Bachillerato’ han podido conocer de la mano de diferentes especialistas el trabajo que se realiza en el centro hospitalario durante los últimos años.
El Colegio Liceo Castilla es centro bilingüe y además ofrece la posibilidad de cursar Bachillerato Dual para conseguir la acreditación del título High School americano. Así los estudiantes pueden aprobar el bachillerato español y cursar una serie de asignaturas que se imparten desde Estados Unidos de manera online a través de una plataforma educativa virtual.
Pero la formación integral de las personas que están destinadas a mover el mundo, a ecolorearlo, va mucho más allá de las notas en un expediente. Crear puntos de encuentro para los alumnos donde el diálogo sea el motor para la resolución de conflictos, buscar mecanismos para canalizar ese tipo de situaciones y favorecer el entendimiento y la convivencia es esencial para la correcta marcha del propio centro. Herramientas que, por otra parte, les sirven y servirán en su día a día.
Con esta premisa, desde el propio centro educativo, con la colaboración de las familias, se están llevando a cabo diferentes iniciativas para humanizar los espacios del colegio y que sean lugares para el diálogo donde los niños puedan sentarse con sus compañeros y poder resolver sus propios desencuentros o simplemente a hablar, todo ello desde un punto de vista más adecuado a su edad.
La atención a las familias genera una forma diferente de trabajar con ellas, integrándolas en la vida diaria del colegio y atendiendo a las demandas y sugerencias que parten de las necesidades particulares de cada una.
De esta manera el horario de madrugadores se ha ampliado a partir de las 7.30h. y se han abierto las puertas del centro para acoger una ludoteca en los días no lectivos, festivos y puentes, para así poder favorecer la conciliación familiar. Por otra parte, la biblioteca se ha transformado en un lugar de trabajo y estudio donde los alumnos pueden ir tanto a mediodía como por la tarde para realizar sus tareas.
Este espacio está gestionado por un grupo de padres voluntarios que incluso hacen actividades como maridajes literarios. Estas iniciativas que enriquecen tanto a los adultos como a los niños, favorecen una convivencia activa y que el propio colegio sea un ser vivo que evoluciona y se reinventa continuamente.
El Colegio Liceo Castilla cuenta también con cocina propia y elaboran sus propios menús dentro de criterios acordes con una dieta equilibrada. A partir de ahí, se ha querido dar una vuelta de tuerca más y convertir este espacio en un comedor transparente, abierto a las familias para su visita y uso ocasional, resolviendo sus dudas y conociendo las instalaciones de la cocina, la calidad de los alimentos con los que se elaboran los menús o cómo trabajan las personas encargadas del comedor.
En el ADN del Colegio Liceo Castilla está el deporte como parte esencial de su formación en valores. Dentro del Club Deportivo Liceo Castilla se integran numerosos equipos de disciplinas deportivas distintas que participan en todas las categorías de competiciones locales, provinciales y regionales.
Asociado al deporte, el colegio es el núcleo integrador de otras muchas actividades que favorecen tanto la convivencia dentro y fuera del centro. El Grupo Scout Arlanzón, abierto a niños y jóvenes de la capital burgalesa y cuya sede está en el propio colegio, con más de 50 años fomentando valores como la integración, la fraternidad entre sus miembros y el respeto por la naturaleza.
Otra iniciativa nacida desde el ideario de los colegios Maristas son los Grupos Marcha, que en Burgos integra a más de 140 chicos y chicas de diferentes edades.
Una formación de calidad, trasversal, integradora y basada en valores, que acompañe al alumno de manera personalizada y atienda a sus necesidades en todas sus etapas de desarrollo. Todo ello para formar personas que den una pincelada de color al mundo, o como recoge su lema, que ‘Ecolorean’ el mundo desde un punto de vista ecológico, económico y ecosocial.
En definitiva, ciudadanos honrados y responsables con su legado.