MUNICIPAL
El 60% de las terrazas amplía su espacio durante la pandemia
Las terrazas cubiertas «han llegado para quedarse», pero en las 55 ubicadas sobre aparcamiento se prevé que puedan volver a usarse por los vehículos
Las terrazas de hostelería se han convertido, durante la pandemia de la covid-19, en uno de los pocos recursos que ha quedado a este sector económico para desempeñar la actividad. Durante la desescalada, justo hace un año, las administraciones autorizaron la actividad hostelera solo en la vía pública y desde entonces, con ciertos periodos de cierre en los picos más altos de la incidencia del virus, las terrazas se han sido un elemento más del paisaje urbano. Quizás antes de pasar por la situación sanitaria en la que permanecemos no se prestaba tanta atención a la presencia de veladores en la calle, pero en los últimos tiempos son lugares de convivencia entre familias y amigos, casi los únicos permitidos.Las tres novedades que ha traído la pandemia al mundo de las terrazas, que ha regulado el Ayuntamiento de Burgos desde la desescalada, han sido la posibilidad de solicitar la ampliación del espacio disponible en la vía pública, la instalación en la calzada, ocupando plazas de aparcamiento, y la colocación de cerramientos para la supervivencia del negocio durante los meses más fríos del año.La capital burgalesa cuenta a día de hoy con 759 terrazas, de las que 437 han solicitado incrementar el espacio autorizado, lo que representa que casi un 60% de los establecimientos ha optado por la ampliación.Hay 55 terrazas que ocupan tramos de aparcamiento, 35 en 'zona blanca', que de media hacen uso de tres plazas de estacionamiento y otras 20 en zona regulada ORA, que ocupan otras 2 plazas. De esta manera, desde el área de Licencias del Ayuntamiento se calcula que se ocupan en total 145 aparcamientos.En cuanto al cerramiento de veladores en la vía pública, son 34 las declaraciones responsables de los propietarios de negocios que ha tramitado el Ayuntamiento durante este año en las que se ha especificado que se cubrirá la terraza.Todas estas novedades han venido acompañadas de la exención del pago de la tasa de ocupación de la vía pública. En 2020, como consecuencia de esta medida, incluida en el primer plan de crisis que se aprobó por unanimidad, se devolvió a los hosteleros el importe que se les había girado durante el primer trimestre del año. En total fueron 42.172,75 euros. Esa gratuidad en la tasa acaba el próximo 30 de junio por lo que se ha previsto que a partir del 1 de julio se comenzarán a emitir los recibos de la tasa de ocupación para las autorizaciones que se concedan nuevas y de ampliación de las ya existentes.El concejal responsable de Licencias, Julio Rodríguez-Vigil, explica que con el fin del estado de alarma todas las medidas excepcionales que se han tomado en este ámbito se irán reconsiderando de manera paulatina. Además, recuerda que se está trabajando en una nueva Ordenanza de Terrazas, que vendrá a sustituir a la que está en vigor desde 2011 y que se está retocando frente a la presentada por el Ayuntamiento el febrero de 2020. Para ello se está teniendo en cuenta la propuesta que han realizado los hosteleros.Hay que recordar que durante este periodo excepcional el marco regulatorio de las terrazas se basa en sendos decretos de Alcaldía. El de 2 de octubre de 2020, referente a la autorización de la protección y la climatización temporal de terrazas, que está vigente hasta el 31 de diciembre de 2022, con la posibilidad de que pueda prorrogarse. Por lo que los cerramientos de hostelería tienen un margen todavía amplio y podría incrementarse.Mientras, el decreto de 26 de mayo de 2020 por el que se estableció la posibilidad de ampliar el espacio destinado a veladores durante la desescalada de la covid-19 estará vigente hasta que el Pleno considere que han decaído las condiciones extraordinarias debidas a la pandemia.Con estas pautas, que todavía están en vigor, Rodríguez-Vigil considera que, al margen de si se mantienen las características de los cerramientos tal y como se establecieron el pasado octubre, las terrazas cubiertas «han venido para quedarse». En concreto se refiere a aquellas en las que no existe cerramiento lateral en todo su perímetro, sino que dejan una zona abierta. Desde su punto de vista, proporcionan una sensación de confort con la posibilidad de colocar instrumentos de calefacción.Sobre aparcamientoOtra cuestión es que pasará con las terrazas sobre aparcamiento. «Nuestra intención es que, una vez que se apruebe la nueva ordenanza, se repongan las plazas de aparcamiento a su estado inicial para su uso otra vez por los vehículos», explica. Sin embargo, no descarta que el nuevo texto normativo sobre los veladores pueda recoger alguna disposición que permita el montaje de este tipo de terrazas sobre la calzada en situaciones extraordinarias, en determinados periodos del año o en zonas localizadas. Para solicitar la ubicación de varios veladores en la calzada es necesario un informe favorable de la Unidad de Tráfico, en el que se valora la compatibilidad de colocar la terraza en calzada con la seguridad del tráfico. Esto es obligatorio para aquellas instalaciones en una zona de estacionamiento libre. Sin embargo, cuando existen plazas en zona azul, se necesita informe favorable del Servicio Municipal de Ordenación y Regulación de Aparcamiento de Vehículos en Vía Pública (ORA).En cuanto al aforo de las terrazas, una vez decaído el estado de alarma, todavía estará condicionado a la evolución de la pandemia. Desde el área municipal de Licencias recuerdan que este extremo depende de las competencias de la Junta de Castilla y León.