La estación de autobuses recupera el 60% de actividad con respecto a antes de la pandemia

La Estación de Autobuses Municipal de Burgos todavía está lejos de la actividad habitual de la época anterior a la pandemia, pero con el fin del estado de alarma, el pasado 9 de mayo, se va recuperando «poco a poco» el volumen de tráfico y de viajeros. En estos momentos se calcula que alcanza el 60% del movimiento prepandemia.Desde el Servicio de Movilidad y Transportes del Ayuntamiento (Smyt), indican que en un día de entre semana durante 2019 se llegaban a contabilizar unas 110 entradas de autobuses, entre los provinciales, los interprovinciales y los de largo recorrido. Este volumen se vio reducido en 2020 en más de un 90% cuando apenas salían 10 autobuses a diario y llegaban alrededor de 20. Este 2021 la situación comienza a recuperarse con unas 60 salidas y 80 entradas de vehículos de viajeros a la estación. Este ejemplo que pone la gerente del Smyt, Patricia Cecín, obedece a las rutinas de un miércoles, pero si se ven las cifras de un viernes, el día con más movimiento, se comprueba como este año se contabilizan unas 80 entradas y un centenar de salidas.Con los datos de un mes intermedio, es decir fuera de la temporada estival, se ve que el tránsito de autobuses, alcanzaba los 6.900 entre entradas y salidas en 2019, que bajó a 1.800 en 2020 y en los meses de 2021 se llega a 3.500 autobuses de media.La llegada del verano, el fin del estado de alarma y del toque de queda debe contribuir a incrementar ese movimiento para acercarlo a los niveles de 2019. Esta es la expectativa que manejan los responsables de la estación de autobuses.  De hecho, indican que los últimos fines de semana se está notando mayor demanda de viajes y, por tanto, las compañías van incorporando más servicios para atender a los pasajeros que necesitan transporte a Madrid, País Vasco y Cantabria.Durante los meses de verano es habitual que se registren entre 170 y 180 entradas a las instalaciones de la calle Miranda y un número similar de salidas. Mientras, en julio de 2020 se alcanzaron unas 100 entradas y unas 110 salidas diarias,Los servicios metropolitanos y provinciales fueron los primeros en recuperarse durante el pasado año 2020 para dar asistencia a las zonas rurales, mientras que los nacionales lo van haciendo en función de la demanda de los usuarios.En cuanto a los viajes internacionales, que se podían realizar desde Burgos, la situación avanza a un ritmo más lento.  Únicamente se ha recuperado algún servicio con Francia, Alemania, Bulgaria y Portugal, mientras que Marruecos sigue parado. De todos modos, cualquiera de los viajes internacionales está lejos de las frecuencias de estos servicios en condiciones normales.El movimiento de viajeros ha vivido grandes oscilaciones en los últimos tiempos. Ha habido momentos, en la época más dura de la crisis del coronavirus, en el primer estado de alarma, entre marzo y junio del pasado 2020, que las restricciones de movilidad eran máximas. Y después se impusieron limitaciones en el aforo que restaron pasajeros a los pocos que ya de por sí se movían. Así, recuerdan como a mediados de marzo de 2020 se restringió el acceso a la estación de autobuses como una de las medidas de protección implementadas como consecuencia de la crisis sanitaria. Así, solo podían acceder las personas que iban a desplazarse. Meses más tarde, cuando se generalizó el uso de las mascarillas, y se relajaron las restricciones a la movilidad la situación fue modificándose. Durante 2019, un año sin incidencias sanitarias como las que han venido después, el volumen de viajeros registrado fue de 1.192.773 personas con origen o destino Burgos. En el ejercicio completo de 2020  pasaron por la estación de autobuses 533.544 viajeros. La reducción fue de un 55%.Según los datos proporcionados por Smyt, en los primeros meses de este 2021, hasta el pasado 24 de mayo incluido, han pasado por la estación 140.314 viajeros.A la vez que mejoran los datos de incidencia de la enfermedad del coronavirus, surgen nuevas necesidades de movilidad y más cuando se llega a la época de vacaciones. Sin embargo, es necesario que la población recupere la confianza en el transporte colectivo de viajeros tanto para las grandes distancias como también en los trayectos urbanos que se han visto afectados con un descenso de usuarios.