Buenas perspectivas para la rehabilitación
El sector espera el desarrollo de las convocatorias de las ayudas para eficiencia energética de edificios
El sector económico de la regeneración urbanística tiene buenas expectativas para los próximos ejercicios a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España y la llegada de fondos europeos destinados a la rehabilitación energética de las edificaciones. El Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico publicaba el pasado 3 de agosto un programa dotado con 50 millones de euros, de los cuales 10.945.000 euros están destinados a Castilla y León. En este caso, promueve la rehabilitación energética en municipios de menos de 5.000 habitantes, pero se espera que pronto se conozcan los planes para municipios más grandes.El arquitecto Agustín Herrero, de Canal a4 Urbanismo y Arquitectura y uno de los responsables del ARU de San Cristóbal y en su momento del de Río Vena, explica que las convocatorias de ayudas directas para proyectos de rehabilitación de este 2021 tienen como principal novedad el incremento de fondos por el empuje de la Unión Europea hacia este sector. Las perspectivasson buenas, pero todavía falta recorrido administrativo porque faltan de conocerse cuestiones básicas como la articulación de este tipo de ayudas. «Cada Comunidad Autónoma tiene que dar las bases para que los propietarios puedan emprender la marcha. O bien conocer qué organismo lo hace si será el Ministerio o el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE)», indica Herrero, que señala que todavía hay mucha incertidumbre.Para el arquitecto este tipo de ayudas directas a proyectos de eficiencia energética, en las que entran reformas de fachadas, cubiertas e incluso instalaciones interiores como calderas, son más prácticas que tramitar un Área de Rehabilitación Urbana (ARU). «Con las nuevas líneas se prevé que se subvencionen porcentajes más altos de las obras, casi tanto como en los ARU, en los que se llega a un 80%, pero con una tramitación más sencilla», señala, a la vez que recuerda que gestionar un ARU requiere un mínimo cinco años antes de comenzar las obras.