Los vinagrillos de la Bodeguila de Santa Clara bien merecen un ‘Solete’

Bares y tabernas de toda la vida, la bodeguilla de tu barrio que tiene un pincho único o el restaurante con el mejor menú diario. Espacios únicos en lo cotidiano que te hacen volver un día sí y otro también y que recomiendas a familia y amigos. Así son los lugares en los que la Guía Repsol pone el foco con los denominados ‘Soletes’, una calificación que estrenó el pasado mes de junio con los mil primeros del verano y que ha continuado entregando este otoño. Precisamente uno de los rincones reconocidos ha sido la Bodeguilla de Santa Clara, un espacio tradicional y emblemático de la capital burgalesa en el que Carlos Sierra lleva cuatro décadas ofreciendo «los mejores vinagrillos».«Es un satisfacción recibir un reconocimiento como este después de tantos años de trabajo», señala Sierra, quien apunta que es el «broche a toda una vida dedicada a la hostelería».Apunta que lo de hacer vinagrillos no es cosa banal, «ni se trata de meter cuatro cosas en un palillo» . «Además de escoger la mejor materia prima, el éxito de un buen pincho vinagrillo reside en la preparación y el cariño que se pone».De toda su oferta y «como no puede ser de otra manera», Sierra se queda con la ‘gilda’. «Es el pincho perfecto para acompañar el vermut, tanto para tomar un vino como una cerveza, porque deja un sabor en boca muy especial», comenta entusiasmado. «La elaboración y la presentación deben ser perfectas para hacer un buena ‘gilda’».Asegura agradecido que, «a pesar de la pandemia, cuando hemos podido dar servicio tanto solo en exterior como ahora también en el interior, hemos funcionado muy bien y eso se lo tengo que agradecer a mis clientes». Apunta, además, que en «la calle Santa Clara se ha creado un ambiente muy bueno» y anima a los burgaleses a cruzar el Arlanzón para disfrutar de un buen vinagrillo.