Las obras del polideportivo San Pedro y San Felices arrancarán en septiembre

Tras dos años de retraso, las obras del polideportivo San Pedro y San Felices podrían ser una realidad el próximo mes de septiembre. Así  lo explica el concejal de Deportes, Levi Moreno, quien señala que la financiación del proyecto estará sujeta a la primera modificación presupuestaria del año 2022. «La dotación para la obra no se incluye en el presupuesto de 20202 porque está muy constreñido y las partidas dedicadas a inversiones están destinadas a proyectos ya arrancados», explica el concejal. Así, la comisión de Urbanismo daba hoy luz verde a la propuesta de aprobación definitiva del Estudio de Detalle del nuevo polideportivo de San Pedro y San Felices. Un nuevo paso administrativo que supone avanzar en la creación de un nuevo espacio deportivo en la zona sur de la ciudad.El siguiente será la aprobación definitiva del proyecto. Una propuesta con la que, sin embargo, no está de acuerdo el Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Burgos, que lamenta que «se haya apostado por parte del bipartito por un proyecto exclusivo para la práctica de gimnasia» y no por «la construcción de un polideportivo polivalente, que satisfaga las necesidades deportivas de la ciudad.A este tenor, los populares consideran que «un proyecto que permita el uso de la instalación para varias disciplinas supondría un mejor aprovechamiento de los recursos públicos y la oportunidad de generar en nuevo foco de referencia en materia deportiva». Frente a esta posibilidad, la formación critica que «el bipartito plantee un proyecto cerrado, que no se ha consensuado con los vecinos ni los grupos de la oposición».Sobra esta cuestión, Moreno señala que «el polideportivo tendrá espacios dedicados a la gimnasia rítmica y artística, al tenis de mesa y al fútbol siete», así como «un espacio polivalente». Recuerda el concejal de Deportes que «en la ciudad hay tres clubes de gimnasia más las prácticas de los Juegos Escolares que necesitan un espacio» porque  «de lo contrario estaríamos abocando a esta  disciplina a la desaparición».De hecho, recuerda el edil que «si bien la gimnasia rítmica se desarrolla en un ámbito de base», en el caso de especialidades como el trampolín «contamos con grandes deportistas participando en campeonatos nacionales y europeos», que «necesitan de un espacio de entreno».A juicio de los populares, el alcalde, Daniel de la Rosa, «se ha dejado llevar de nuevo por la imposición de Ciudadanos y no ha tenido en cuenta en su planteamiento las necesidades de la zona sur, ni del conjunto de la ciudad, propiciando de este modo un gasto excesivo con la infraestructura que plantea». La formación lamenta, además, «la exoneración que se hace en el proyecto para no cumplir con la obligación de dotar a la futura instalación de las plazas de aparcamiento regladas, lo que sin duda generará problemas en la movilidad en el barrio». «Es incomprensible», apunta la formación, «si se tiene en cuenta la congestión de tráfico que existente en la zona y la posibilidad de que autobuses y vehículos privados acudan al polideportivo para disfrutar de competiciones». Por todo esto, el PP apela a la responsabilidad del PSOE para «repensar el proyecto y hacer una buena gestión de los recursos públicos e impulsar un proyecto más ambicioso, que cubra las necesidades deportivas de una ciudad que, en la actualidad, solo dispone de dos polideportivos de parqué para múltiples disciplinas». «No se trata de hacer por hacer. Es necesario pensar en futuro y en las necesidades, en este caso deportivas, que pueda tener una zona que ha experimentado un amplio crecimiento en los últimos años y en la que reside un importante número de niños y jóvenes», han concluido los populares. Piedras y mármolesPor otra parte, el consejo de la Gerencia Municipal de Fomento daba el visto bueno  esta mañana a la propuesta de aprobación inicial del proyecto de actuación en el solar de la antigua ‘Piedras y Mármoles’, promovido por la Sareb. Si bien los antiguos promotores del solar tenían pensado levantar una promoción de doscientas viviendas en el zona, pero la propuesta se vio paralizada por problemas económicos y acabó  en el denominado ‘banco malo’. Tras una subasta cerrada sin ofertas, finalmente se vendió  el solar.  Ahora los promotores «tendrán un plazo máximo de tres años para desarrollar viviendas en el espacio», apuntó  el concejal del área, Daniel Garabito.