Leva del biberón: niños con fusil, abuelos casi olvidados
Basilio Miguel recrea en ‘El triángulo de Epi’ esta generación marcada por una guerra, una postguerra de carencias, el exilio y una pandemia en sus últimos días. Lo presenta hoy en Quintanar de la Sierra a las 19 horas.
2020 fue un año marcado por la pandemia. Para algunos centenarios la despedida mas agridulce de una vida a los que la historia les debe más de una. El escritor y profesor burgalés Basilio Miguel ha querido rendir homenaje a la denominada Quinta del Biberón. Aquellos que abrazaron la juventud con un fusil para cubrir bajas de la Guerra Civil, sufrieron el hambre de la postguerra, buscaron un futuro en la emigración primero de su pueblo, de su hogar, después a tierras lejanas. Levantaron un país con sus propias manos y, en el final de sus días, cuando bordan la centena, es una pandemia la que les ha alejado de sus casas y de sus familiares.
Entre esa generación se encuentra el padre de Basilio Miguel que ha hecho un homenaje a la leva del biberón en un pueblo de la sierra imaginario, Vallehermoso de Arlanza, cerca de Quintanar de la Sierra. En el municipio serrano presenta hoy ‘El triángulo de Epi’, editado por Aldecoa. Su homenaje en forma de relato a Epi y aquellos de la generación de los años 20 que «en el 38 fueron llamados a la guerra, tanto en el bando republicano como en el sublevado, con 18 años, algunos sin cumplirlos y que en 2020 cumplirían 100 años, jóvenes que nunca vieron cumplir sus sueños porque tuvieron que dejar sus pueblos, sus familias, como mi padre en Castrojeriz, y lanzarse a una guerra llenos de miedo, inexpertos en temas bélicos y muchos dieron su vida en batallas crueles como la del Ebro, la mas sangrienta y extensa de la guerra», reflexiona Miguel.
Lo ha podido constatar de primera mano. No solo por los relatos de su padre, también porque conoció en Quintanar a uno de los miembros de esta Leva del Biberón. «Mantenía vivo el recuerdo de la orden de movilización e incorporación a filas del reemplazo de 1941, así como su incorporación al regimiento de San Marcial Nº 22 de infantería y su posterior traslado, hacinados, en vagones especiales de transporte de ganados hacia el frente», relata. «Era el momento de recordarles», apunta.
El ‘Triángulo de Epi’ es el cuento de una generación marcada por las circunstancias donde hay acción, drama, venganza y personajes que escenifican esa vida hecha con lo que se podía y cómo se podía. El viaje arranca en la sierra y en niños sin barba a los que la primera mujer ministra de Europa, de la cartera de Sanidad y Servicios Sociales, Federica Montseny, dio nombre al expresar ante el adelanto de la mili a un año por la falta de tropas: «¿diecisiete años? Pero si todavía deben tomar biberón».
'El triángulo de Epi' es la segunda novela de Basilio Miguel. SANTI OTERO
El relato incluye, a través de diálogos entre los personales, las vivencias de cada uno de ellos, el trágico despertar a su vida adulta y la vida difícil que han tenido hasta llegar a hoy. Algo que Basilio Miguel resume a través de un fiel contexto histórico y un claro mapa geográfico. Epi, el protagonista, acude a la temprana llamada a filas y abandona su pueblo. No volverá hasta peinar canas y cumplir una venganza. Después del fusil llega al Burgos capital donde vive su tío. Es testigo de momentos tan singulares como la gran nevada del 56, el trabajo en la sedera y su mítica chimenea, acude al desfile de franco uy a la inauguración de la estatua del Cid. Y se ve obligado a abandonar su referencias de la niñez y la juventud para buscar una vida mejor en Bilbao. Un ejemplo de la emigración a las grandes urbes que hoy ha dejado una estela de pueblos abandonados. El Bilbao de esa época se refleja en las páginas entre el ambiente del cabaret y las vedettes donde encuentra el amor, el Athletic que dominaba la competición nacional y la mina de San Luis y el muelle de Marzana escenario de momentos importantes de la novela.
No será la única emigración que afrontaría Epi, igual que los de la Quinta del Biberón. Con su pareja volverá a emigrar. Llegará a Venezuela a donde se va por dos motivos, la oportunidad de un país en expansión donde el gobierno venezolano firmó un convenio para facilitar la inmigración de españoles a partir del 52. Allí se encontrará con su tío Valdo, vivirá la madurez en este rincón tan lejano que cierra el triángulo geográfico de su vida. Allí seguirá hasta los enfrentamientos de Puente Llaguno que le hacen regresar a sus orígenes donde cumplirá una promesa. En este nuevo escenario, Basilio describe el día a día en los pueblos como Vallehermoso de Arlanza. El reencuentro con los amigos de la infancia.
La pandemia retrasó la publicación de su segundo trabajo, tras haber publicado ‘Tras las huellas de Tahiel’ en 2014. «Hemos tenido un poco de mala suerte. Quería contar con un integrante de la quinta del biberón en la presentación que estaba prevista para el 28 de marzo, por la pandemia no se pudo hacer», lamenta. Cuando la Feria del Libro estaba previsto que viera la luz. Se retrasó en septiembre y en abril, pero en septiembre de este año pudo presentarla por primera vez, aunque no con todos los participantes que hubiera querido.
Hoy vuelve a la tierra que se adivina en las líneas de ‘El triángulo de Epi’ para presentar su último libro. En el salón de actos del Ayuntamiento de Quintanar de la Sierra permitirá recordar a la Leva del Biberón, a aquellos que abandonaron su tierra para volver ancianos y llenos de recuerdos. Hoy a las 19 horas.