SANIDAD
El pico de ingresos por Covid en el HUBU llegó a los 22 pacientes al día
Actualmente entran en el hospital entre 2 y 7 pacientes diarios / En la Unidad de Corta Estancia, ahora adaptada como una unidad de covid más, los pacientes ingresan durante 24 ó 48 horas hasta repetir PCR y ser derivados a plantas covid si han resultado positivos
En apenas dos semanas se cumplirán dos años del inició de una pandemia que nos cambió la vida. Durante todos estos meses parte del Hospital Universitario de Burgos tuvo que adaptarse y transformarse para acoger y asistir a miles de burgaleses que tuvieron que ser ingresados a causa de la covid-19 con cuadros de mayor o menor gravedad. Por todos es ya conocida la denominada H7, espacio que el centro hospitalario ha destinado desde un inicio a los pacientes infectados con covid-19. No lo son tanto otros puntos del hospital que se han rediseñado con el objetivo de facilitar el triaje y el ingreso de los enfermos. Este es el caso del espacio antes conocido como Unidad de Corta Estancia (UCE), que servía para realizar ingresos breves y que ahora es una unidad de covid más.La UCE nacía en 2013 como una alternativa a la hospitalización convencional, ofreciendo unas estancias más cortas y una más rápida incorporación del paciente a su vida y entorno habitual. Ahora ese espacio se ha redefinido para convertirse en una unidad de covid más del centro hospitalario. En este espacio «han ingresado lo que denominamos ‘sospechas covid’, que son aquellos pacientes sobre los que existe sospecha clínica de covid pero con PCR negativa», explica la doctora Carmen Fernández Martínez de Septién, jefa de Unidad de Neumología del HUBU. En este espacio «ingresan 24-48 horas hasta repetir la PCR y ser derivados a plantas Covid si son positivos o a las plantas convencionales de Neumología o Medicina Interna si son negativos».Si bien el número de pacientes covid que accedía al HUBU ha sido muy variable dependiendo de la incidencia, «el pico de ingresos ha sido de 22 personas al día, mientras que en esta última semana el número de ingresos ha oscilado entre 2 y 7 personas al día», comenta la jefa de Neumología. Así, «al inicio y como es lógico, el índice de rotación fue menor, es decir, había muchos más ingresos que altas y actualmente es a la inversa».De hecho, la doctora Fernández explica que «la variante ómicron ha presentado dos características diferenciales: su alta transmisibilidad y su menor virulencia, especialmente en pacientes ya inmunizados». Eso ha llevado a que «con una incidencia acumulada máxima de 5.700, que ha sido el pico más alto en la capital burgalesa, hemos tenido 4 plantas Covid en el HUB; mientras que en el pico máximo de la segunda ola, con una incidencia acumulada de 1.800, precisamos de 11 plantas y la apertura de una planta en el Hospital Divino Valles».Es decir, «con una incidencia acumulada multiplicada casi por 3, hemos tenido un tercio de hospitalizaciones». En esta última ola se ha dado otra peculiaridad. «Entre el 20-30% de los ingresos han sido por otros motivos, es decir, eran pacientes que tenían covid, pero que no hubieran precisado ingreso por esta patología. Incluso eran asintomáticos, pero la PCR obligatoria previa al ingreso resultaba positiva». Así, según la estadística realizada por el doctor Fernando Richard en un corte transversal del 22 febrero, «el 80% de los pacientes en plantas Covid habían ingresado por la enfermedad y el 20% estaban ingresados con covid pero por otras patologías». Dicho esto y a pesar de haber un menor número de plantas utilizadas para covid, la jefa de Neumología explica que «las cuatro plantas abiertas actualmente tienen mucha repercusión asistencial como es fácil de imaginar».En planta Covid«A las plantas Covid solo llegan pacientes con PCR positiva». En ellas «se inicia terapia farmacológica y soporte respiratorio según el protocolo Covid del HUBU, con una actualización reciente, y siempre consensuado entre Medicina Interna y Neumología», comenta la facultativa, quien añade que «tenemos una zona de monitorización para los pacientes más graves que requieren soporte respiratorio no invasivo, como paso previo a la UCI si fuera necesario». «La covid nos ha enseñado a no hacer predicciones»La jefa de Unidad de Neumología del HUBU lo tiene claro: «Si una cosa hemos aprendido con la covid-19 es a no hacer predicciones». Y es que, a pesar de que con la llegada de ómicron fueran varias las voces que avanzaron que con esa nueva variante podía llegar el final de la pandemia derivada de la covid-19, para la responsable de Neumología «el sentido común nos hace pensar que el final de la pandemia no va a ser algo brusco o que se acabarán las olas».La facultativa avanza que «habrá más olas, pero en algún momento dejaremos de contarlas». En este sentido, explica que «cada ola nos va dando información sobre cómo va la pandemia y si bien la evolución es claramente positiva, aún quedan ingresos, pacientes graves y, por desgracia, fallecimientos».De hecho, la neumóloga señala que «mientras haya personas no vacunadas en el mundo, o mal inmunizadas por situación de inmunodepresión, el SARS-Cov-2 seguirá produciendo enfermedad e ingreso». Lo positivo de esta situación es que «en cada ola el porcentaje de ‘pacientes vírgenes’, es decir, que nunca han pasado la enfermedad, es menor, y tanto el conocimiento sobre la enfermedad como los medios terapéuticos son mejores».La mejor noticia, según la doctora Fernández, es que «estamos preparados para atender a cualquier paciente que precise ingreso por covid, independientemente de su edad y su grado de afectación». Asegura además, que «la covid incluso ha propiciado la mejora de las buenas relaciones previas entre todos los servicios implicados (urgencias, interna, neumología, UCI,etc), lo que es prueba de un excelente trabajo de equipo que se lleva a cabo»