Cerrar

CURPILLOS 2022

Burgos recupera la fiesta del Parral 2022 por todo lo alto

Miles de personas han abarrotado el parque del Parral para celebrar el Curpillos 2022 / El calor y las ganas celebrar fueron las grandes protagonistas de una de las fiestas más genuinas de la capital burgalesa

Miles de burgaleses celebraron la fiesta del Curpillos 2022. SANTI OTERO

Publicado por
Burgos

Creado:

Actualizado:

Calor. Mucho calor. Y muchas ganas de celebrar. Eso sobre todo. Dos años de pandemia se han hecho muy largos y los burgaleses tenían muchas ganas de recuperar una de sus fiestas más queridas y, sin duda, la más multitudinaria.  Y así lo han demostrado con un Curpillos que ha vuelto por todo lo alto.

Miles de personas han abarrotado desde primera hora de la mañana el parque del Parral para celebrar el Curpillos 2022. Y lo hicieron con ganas, con alegría y con mucho calor. Mayores, jóvenes y niños disfrutaron cada uno a su manera de la jira de este día tan especial para la capital burgalesa.

Varios peñistas preparan morro en una parrilla. SANTI OTERO

Las ganas de celebrar fueron las grandes protagonistas de una jornada colmada de buenas viandas, música y reencuentros. La cerca de cuarenta peñas burgalesas tenían todo perfectamente organizado para recibir a los miles de burgaleses que se acercaron a la campa para disfrutar de la jornada después de la procesión. Gran parte de ese montaje se hace la jornada anterior, pero el viernes el madrugón es obligatorio para recibir los suministros de carne y bebidas y tener todo listo antes de que lleguen los primeros ‘parroquianos’.

Una cerveza por aquí. Un calimocho por allá. Los más jóvenes celebran el fin del curso escolar. Muchos de ellos se acaban de enfrentar a la EBAU y afrontan un verano  intenso antes de comenzar sus estudios superiores. Es el caso de Carolina y Paula. «La fiesta del Curpillos es la mejor de la ciudad sin ninguna duda», aseguran y señalan que ya están impacientes porque «lleguen las fiestas de Burgos».

Parejas jóvenes y niños se juntan a la sombra de un chopo para disfrutar de unos pinchos de morro mientras los más pequeños se refrescan con globos de agua. «Hace unos años veníamos a pasar el día, a beber y a salir de fiesta después, ahora que tenemos hijos seguimos viniendo pero de otra manera. Más tranquilos», apunta Diego entre risas. 

Varios jóvenes posan en el Curpillos. SANTI OTERO

Cerca, un grupo de señoras brinda por «la vuelta del Parral». Las cuatro amigas explican que llevan «toda la vida» viniendo a la fiesta del Curpillos. «Primero vamos a ver la procesión y después nos acercamos al Parral a comer», explica Carmen.

Han cogido unos pinchos de chorizo en la peña Los Pitufos. Detrás de la barra todo es trajín, un continuo ir y venir de peñistas que aprovechan los momentos más relajados para lanzar al aire cánticos festivos. Uno de los peñistas, encargado de la parrilla, señala haciendo grandes aspavientos que «el calor el asfixiante». Asegura que, a pesar del calor, está siendo un día «fantástico». Asegura que los burgaleses y especialmente los peñistas «teníamos muchas ganas de recuperar las fiestas de Burgos y esta es una de las más importantes para nosotros».

Las peñas estuvieron llenas constantemente. SANTI OTERO

A esas alturas de la mañana, el alcohol ya hace estragos en más de uno y aunque muchos jóvenes saben disfrutar de la fiesta, algunos siguen dando prioridad a la borrachera, pero la inmensa mayoría lo hace a disfrutar del día, las buenas viandas y la compañía. Ya fuera del recinto, algunos pasean entre los puestos del mercadillo. «Siempre cae alguna cosilla para el peque», comenta Sonia al tiempo que señala las gafas con mensaje que ha comprado a su hijo.

Para otros, la fiesta del Parral fue una jornada de trabajo y es que al margen de los peñistas, decenas de voluntarios se encargaron de atender a los burgaleses y de mantener lo más limpio posible el espacio. Protección Civil y Cruz Roja se encargaron de atender las diversas incidencias que se produjeron a lo largo del día como consecuencia sobre todo del calor y de la ingesta de alcohol. También los bomberos se turnaron para estar presentes en el parque durante toda la jornada, así como diversos efectivos de la Policía Local.

Un grupo de amigos disfruta del Curpillos. SANTI OTEROS

El denominador común fue que todos los burgaleses disfrutaron del día con una sonrisa en la cara. Sin mascarillas. Al menos la inmensa mayoría. Celebrando que la vida vuelve poco a poco y las ganas de disfrutarla también.