Hallan un pie humano en el yacimiento Ana Zaga de Azerbaiyán
Un equipo formado por arqueólogos españoles ha participado del 5 al 24 de agosto en las excavaciones de la Reserva Nacional Artística e Histórica de Gobustan de Azerbaiyán, financiadas por Fundación Atapuerca / El hallazgo más destacado ha sido el descubrimiento de restos humanos en el nivel 5 de Ana Zaga
Restos humanos recuperados en el nivel 5 del abrigo de Ana Zaga. FUNDACIÓN ATAPUERCA
Un equipo internacional de arqueólogos españoles, azerbaiyanos e italianos han estado trabajando sin descanso del 5 al 24 de agosto en la Reserva Nacional Artística e Histórica de Gobustan de Azerbaiyán. Las investigaciones financiadas parcialmente por la Fundación Atapuerca y Fundación Palarq, tienen como objetivo ampliar el conocimiento sobre el arte rupestre de Gobustan.
Este fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en 2007, bajo la declaración denominada Gobustan Rock Art Cultural Landscape. El hallazgo más destacado de la excavación ha sido el descubrimiento de restos humanos en el nivel 5 de Ana Zaga, una pequeña “cueva” repleta de grabados y restos arqueológicos.
Exterior del yacimiento arqueológico de Ana Zaga.
El arte rupestre prehistórico de Gobustan es el reflejo de las primeras obras artísticas de la Humanidad. En él se reconocen el origen del arte, del simbolismo y de la abstracción humana. Este arte tiene un valor universal por la calidad y densidad de sus grabados, por la cantidad (al menos 7000 motivos) y la variedad temática, cronológica y estilística, y por la continuidad cultural entre los tiempos prehistóricos e históricos.
Desde 2019 y de forma interrumpida a causa del Covid, se han desarrollado allí actividades de investigación centradas en el estudio del arte mueble prehistórico y en el arte rupestre localizado en la montaña de Boyükdaş, concretamente en el entorno de Ana Zaga. Así, el desarrollo de este ambicioso proyecto se centra en conocer la cronología del arte rupestre, obteniendo datos numéricos, y poniendo en relación el arte con las ocupaciones humanas prehistóricas para acercarse a su significado.
Durante la campaña de este año 2022, los trabajos se han centrado en el yacimiento de Ana Zaga. Allí se ha realizado una pequeña excavación para precisar la cronología de las ocupaciones humanas prehistóricas que cubrían una parte de los grabados, y poder datar el arte rupestre.
Vista del panel 29 con grabados del abrigo de Ana Zaga. F. ATAPUERCA
Estos trabajos arqueológicos, cuyo estudio se encuentra en fase preliminar, han puesto al descubierto 5 niveles arqueológicos que contienen ocupaciones desde la Edad Media (en torno al siglo XV) hasta momentos Mesolíticos (aproximadamente hace unos 10.000 años). Durante los trabajos realizados se ha recuperado industria lítica, huesos de animales consumidos por los grupos prehistóricos, adornos personales, restos cerámicos y carbones que permitirán conocer cómo era el clima a lo largo de los últimos 10.000 años.
Sin embargo, el hallazgo más destacado ha sido sin duda el descubrimiento de restos humanos en el nivel 5, atribuido al Mesolítico, periodo histórico que comienza hace unos 10.000 años y en el que los grupos humanos eran cazadores-recolectores. En concreto se ha recuperado un pie humano de un individuo joven (entre 4 y 8 años) que se encontraba en posición anatómica.
A falta de trabajos específicos, los restos documentados permiten considerar preliminarmente que se trata de un enterramiento humano que se realizó en Ana Zaga. Posteriores estudios precisarán la edad del individuo, y deberán determinar la relación entre los restos humanos y los localizados previamente, ya que cabe la posibilidad de que se trate del mismo individuo; ello permitirá determinar el tipo de enterramiento y la posible existencia de un ritual funerario.