Medio Ambiente valora un plan especial para limpiar pintadas vandálicas

Los recursos que se destinan a la limpieza de las pintadas vandálicas en la ciudad se han quedado mermados. Este año las intervenciones están limitadas a las actuaciones que se realizan desde la empresa de limpieza viaria, que no son pocas, pero que no alcanzan el trabajo que se ha venido realizando en los últimos años con las brigadas de Medio Ambiente.

La ausencia de los planes de empleo  de la Junta de Castilla y León, que permitían contratar a personal específico para estas tareas, se está notando en cuanto que no se puede llegar a «todo lo que se llegaba». 

Desde el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Burgos siguen con atención cualquier movimiento por parte de la Consejería de Empleo en relación con la convocatoria de los planes de contratación de personal por parte de las administraciones para poder en marcha las brigadas, pero mientras tanto las pintadas proliferan tanto en espacios públicos como privados. No se descarta, como indica el edil responsable, el socialista Josué Temiño, poner en práctica un plan especial de limpieza de grafitis, si es que la ayuda de la Junta de Castilla y León no acaba de concretarse.

Los trabajadores de los planes de empleo permitían destinar recursos humanos a esta problemática derivada del vandalismo, pero también a otras tareas como la limpieza de solares, escombreras y al mantenimiento del Cinturón Verde.

El equipo de Gobierno municipal, al comprobar el retraso en las convocatorias de estas ayudas para la contratación de personal ha destinado recursos económicos propios durante el verano a emplear trabajadores para el desbroce de solares. Y con la modificación presupuestaria que se aprobaba inicialmente hace unas semanas, a mediados de septiembre, existen recursos, en concreto 90.000 euros, para la limpieza de escombreras y también para labores en el Cinturón Verde. Sin embargo, por ahora, faltan los recursos ‘extra’ para las pintadas.

Durante este mandato, en 2019, 2020 y 2021, se contaba con educadores ambientales (2 o 3 personas) que recorrían los barrios haciendo un mapeo de las pintadas sobre las que actuar en los siguientes meses. Posteriormente, recogían las solicitudes de autorización por parte de los particulares, en su mayoría de las comunidades de propietarios, para actuar sobre pintadas realizadas en fachadas de edificios o bajos comerciales. Además, también  anotaban las necesidades de limpieza en la vía pública, parques infantiles o mobiliario urbano. Y las personas de limpieza realizaban el trabajo en base a esa organización por distritos.

Mientras llegan esos recursos. ahora son los trabajadores de Urbaser, antes Semat, los que se encargan de estas limpiezas. Se atienden las realizadas en la vía pública, así como las llamadas de particulares que solicitan un trabajo en una fachada tras firmar la autorización correspondiente.

Durante 2021 las brigadas medioambientales, que estuvieron contratadas entre junio y diciembre (cuatro cuadrillas compuestas por 26 personas), llegaron a limpiar una superficie de 14.704 metros cuadrados. Se recabaron 787 solicitudes para quitar grafitis y se atendieron 456.