Burgos impulsará la creación de una comunidad energética en un colegio de la capital

El Ayuntamiento de Burgos impulsará un proyecto piloto de comunidad energética local en un colegio público de la ciudad después de que el bipartito diera luz verde a la propuesta de Podemos.

Las comunidades energéticas «permiten que una agrupación de socios produzca, consuma y almacene energía, además de venderla y compartirla», señaló Marga Arroyo, portavoz de la formación. Esto «las convierte en un mecanismo clave para garantizar una transición ecológica de nuestro modelo energético justa, democrática y cercana a la ciudadanía». 

La propuesta, sin embargo, no convenció a los grupos municipales de Vox y del PP. Los primeros votaron en contra asegurando que «lo que hay en España es una emergencia energética no climática y miles de familias que no pueden encender la calefacción gracias al empeño de partidos como Podemos que solo apuestan por energías de molinillos y espejos mágicos, que solo funcionan con subvenciones».

El PP por su parte se abstuvo en la votación. Cuestionó en voz de su concejal Carolina Álvarez «la ubicación de estas comunidades en colegios, espacios de titularidad autonómica» y lamentó que «estas propuestas energéticas no se trasladen al Gobierno central antes de traerlas a un pleno municipal».

Arroyo recordó, en este sentido, que «los centros escolares son lugares óptimos para su instalación porque permiten la colaboración de administraciones, asociaciones de padres y madres (AMPAs) y el tejido social y vecinal de la zona». 

Burgos «no puede quedarse atrás en la transición energética y ecológica necesaria para hacer frente a la situación de emergencia climática» y el Ayuntamiento «debe liderar e impulsar un proyecto piloto de comunidad energética en un colegio que sirva como ensayo para su replique posterior en otros ámbitos de la sociedad o instalaciones municipales», finalizó.