El 32% de los contratos indefinidos firmados en Burgos es fijo discontinuo
La contratación indefinida es casi cinco veces superior que en 2019 pero los intermitentes se multiplican por 14, Suben un 61% los convertidos a fijos
La reforma laboral que entró en vigor en el mes de marzo ha dado un vuelco al panorama de la contratación. Aunque algunos optan por definir el cambio como de nombres. La realidad es que este año se ha multiplicado la contratación indefinida, aunque, es cierto, que lo que más crece es el fijo discontinuo, una especie de contrato temporal recurrente por temporada de actividad.
Este contrato indefinido intermitente es el que se firma en tres de cada diez contratos fijos suscritos este año. En total, según la estadística de contratos del Servicio Público de Empleo (SEPE) que desgrana cifras hasta el mes de octubre, se han suscrito 25.197 contratos indefinidos a los que habría que sumar los 8.524 que se han transformado de temporales en indefinidos. En total, 33.721 puestos de trabajo fijos, sin necesidad de revisar su continuidad en un espacio temporal concreto.
Lo que más crece es el fijo discontinuo. Entre enero y octubre se han registrado 8.233 contratos laborales que se activan de manera temporal. El 32,6% de la contratación indefinida en la provincia de Burgos es de este tipo. La cifra es superior mas de 14 veces a la registrada en 2019. Entonces los fijos discontinuos eran 567. La cifra es superior en hombres, 4.856 firmaron un contrato de este tipo, casi el 59%, mientras que 3.367 fueron suscritos por mujeres.
Entre nuevos y transformaciones se han firmado 33.721 contratos fijos entre enero y octubre de 2022
Con todo, la estabilización en la contratación laboral es la seña de este ejercicio. Se suscriben cinco veces más empleos fijos que en 2019, último año que no estuvo marcado por la pandemia. La transformación de temporales en estables también sube un 61%. En 2019 se suscribieron un total de 5.357 acuerdos de puestos de trabajo indefinidos. A ellos habría que sumar los 5.295 que hace tres años se habían transformado de temporales a fijos. De estos últimos, el 88% eran empleos firmados por obra o servicio o por circunstancias de la producción.
Por tramos de edad se dispara el estreno laboral con indefinidos. En menores de 25 años la cifra ha pasado de unos testimoniales 863 firmas hace tres años a los 5.608 que se han suscrito este año.
Si mejora la estabilidad al iniciar la experiencia laboral, también crece mucho más este tipo de contratación entre quienes están al final de su vida laboral. Se han suscrito 5.720 contratos fijos en mayores de 45 años frente a los 476 que se firmaban en 2019. Es la mayor diferencia del registro de contratos del SEPE en la provincia de Burgos por edades. Por sexos ellos mandan. El 53,4% de los contratos indefinidos lo firma un hombre. Son 13.564 para ellos frente a los 11.766 que protagonizan ellas.
Por tipo de jornada, además del espectacular incremento de los fijos discontinuos, el segundo que más sube es la jornada parcial. Son prácticamente cuatro veces mas los empleos de este tipo frente a 2019. Se han suscrito 16.782, el 67,4% con nombre de mujer, frente a los 1.736 que se firmaron hace tres años. Entonces ellas también firmaban el doble que ellos. En la jornada completa, el contrato mayoritario entre los indefinidos, ellos ganan la partida. De los 10.325 firmados, 3,5 veces más que en 2019, el 63% tiene nombre masculino.