Burgos instará a la Junta a crear una comisión de seguimiento de la obra del centro de salud del Silo

El Ayuntamiento de Burgos instará al consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, a que cumpla el compromiso adquirido en la reunión del pasado 12 de enero para crear una comisión de seguimiento de las obras del centro de salud del Silo.

Con esta iniciativa se acepta la proposición al Pleno, celebrado este jueves, del grupo municipal de Podemos Burgos si bien modificada para que este grupo de trabajo se desarrolle en la Junta, como competente del desarrollo del proyecto, y no en el seno del Ayuntamiento.

De esta manera, 17 corporativos votaron a favor de ella (PSOE, Podemos y Ciudadanos), mientras que otros diez se mostraron en contra (PP, Vox y el concejal no adscrito Julio Rodríguez-Vigil).

En la reunión que mantuvieron el consejero de Sanidad con el alcalde y miembros de las plataformas del centro de salud y por la sanidad pública, Vázquez se mostró favorable a transmitir información «transparente» sobre el estado de los trabajos, cuya nueva fecha de finalización es finales de este año. Además, estuvo receptivo a que los vecinos pudieran visitar el progreso de los trabajos y recibir información de primera mano.

Pues bien recogiendo ese compromiso de la administración regional, desde el Pleno se exigirá que en el plazo de este mes esa comisión esté en marcha y comience a funcionar.

El objetivo es estar pendiente de que los trabajos cojan ritmo, después de las vicisitudes ocurridas con las empresas adjudicatarias de una obra que se iniciaba en 2019. De hecho, este miércoles los vecinos de los barrios de Capiscol, Gamonal, La Ventilla y Castañares se volvían a concentrar para exigir el nuevo centro de salud.

Pleno ordinario descafeinado

Este fue uno de los asuntos de interés del Pleno ordinario de enero, que se convocaba con un único asunto en el orden del día: aprobar la  estimación del recurso presentado por la empresa Arcecarne para que su proyecto de ampliación en el polígono de Villalonquéjar pueda declararse de «interés general» y acceder a las mismas bonificaciones que, en su momento, tuvo la empresa Campofrío en la reconstrucción de su factoría en Gamonal.

Una vez aprobada esta cuestión, con la abstención de PP y de Vigil, el resto de la sesión se dedicó a las proposiciones, entre las que se debatió hasta sobre la necesidad de pronunciarse en contra de las armas nucleares.

Fue el PSOE, que comparte Gobierno con Ciudadanos, el partido que introdujo esta cuestión no sin la crítica de otros grupos, como PP y Vox, que consideraron que el Ayuntamiento no es el foro ni es competente para abordar este tipo de cuestiones que tienen otros lugares de debate, como las Naciones Unidas.

Si bien es cierto que todos los grupos reconocían el riesgo para la Humanidad de que los países almacenen este tipo de armas, no hubo unanimidad, a pesar de que el texto procedía de una declaración a la que se han sumado 32 organizaciones sociales burgalesas.

PSOE, Cs y Podemos respaldaron el planteamiento de reclamar al Gobierno central que firme el Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares de Naciones Unidas, que data de 2017. PP y Vigil se abstuvieron y Vox se pronunció en contra.