El Distrito Oeste de Burgos quiere ser un barrio más verde

La preocupación de los vecinos del Distrito Oeste por el medio ambiente y su deseo de disponer de unos barrios más verdes ha derivado en la puesta en marcha de acciones como la creación de varias rutas para descubrir a los animales autóctonos, la limpieza del río Arlanzón, la reforestación de una zona del cerro de San Miguel, así como la instalación de seis hoteles de insectos.

El concejal de Medio Ambiente, Josué Temiño, y la presidenta de este distrito Marga Arroyo, portavoz de Podemos, junto a una de las responsables de Huerteco Azucena Martín Martín, han presentado la iniciativa desarrollada en los últimos meses, que perdurará en el tiempo para el disfrute de los ciudadanos.  

Temiño explicaba que la junta de distrito trasladó su solicitud al área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Burgos y con 17.800 euros que ha salido del presupuesto del propio distrito se han puesto en marcha las actividades que han tenido «muy buena acogida por parte de los vecinos».

Una de las actividades destacadas está pensada para los escolares de los colegios Aurelio Gómez Escolar, Solar del Cid y Fuentecillas. Como explicaba el edil socialista, consiste en dos rutas que salen de cada colegio en las que hay que seguir las huellas de varios animales pintadas sobre las aceras. 

 

Los itinerarios ambientales de @Huerteco1 realizados dentro del programa 'El barrio verde'️ proponen paseos diferentes por los rincones de Distrito Oeste que te llevarán a unos graffitis en los que conocer mejor los animales autóctonos de nuestra provincia️

Rastreando el pavimento se llega hasta varios murales ubicados en distintas zonas de los barrios de  Fuentecillas, San Pedro de la Fuente o Parralillos, entre otros. Por ejemplo, en Parralillos se ubica la garduña, un mamífero carnívoro de la familia de los mustélidos. Pero también hay otros dedicados a la nutria, a la cigüeña, al erizo, al corzo y a la comadreja. Como concreta Azucena Martín, son animales que están presentes en las cercanías de los entornos urbanos  «que nos rodean y en los que no solemos fijarnos».

Cada mural incorpora un código QR que se puede escanear para conocer las características de cada animal, así como sus costumbres y los lugares donde se les podría encontrar.

Otras iniciativas han sido los talleres de cocina en los que se ha incidido en la reutilización de los alimentos, para evitar que se conviertan en desperdicio o en los cursos de huertos urbanos, en los que se ha enseñado como producir sin salir de la ciudad «nuestros propios alimentos».

La presidenta del Distrito Oeste ha destacado, por su parte, que estas actividades son un ejemplo de que «los distritos funcionan» y de que se pueden sacar proyectos adelante. Marga Arroyo ha reconocido las dificultades y la necesidad de «dar una vuelta» a su funcionamiento para que ganen en agilidad, pero ha puesto en valor los proyectos desarrollados en los últimos meses.

Uno de ellos es este relacionado con el medio ambiente, pero ha recordado las obras de dos tramos de carriles bici como el de San Juan Bautista y como el que unirá Malatos con San Amaro, a través del paseo de Fuentecillas, que se va a pintar en las próximas semanas.