¿Comprar devoluciones de Amazon? Alguien ha hecho negocio y da la vuelta al comercio on line
Empezó a comprar devoluciones de Amazon "por probar" y se enganchó a las subastas on line de mercancía y la expectación del unboxing a gran escala. Meses después adquiere trailers de productos devueltos que comercializa en apps y, ahora, en una tienda física en Burgos
Se ha llevado alguna que otra sorpresa, pero la compra y posterior venta de devoluciones de Amazon ha enganchado a Javier Hernando. Inquieto en montar negocios singulares empezó hace unos meses en este proceso de compra a ciegas de artículos devueltos. "Me pareció curioso, me empecé a informar, probé con un par de palés para probar, vi que no se perdía mucho dinero, así que si empiezas en algo que no tienes ni idea y no pierdes mucho no me pareció mal", explica.
Con el tiempo ha perfeccionado el proceso desde la subasta de lotes, a la capacidad (ahora acude a manifiestos de carga, como se denominan las diferentes subastas virtuales, de Amazon, Harrods, Wallmart, Uniliver o Disney), y el sistema de recepción, gestión y arreglo de los productos. Pero también en la venta a través de las aplicaciones de segunda mano y reciclaje de productos. Ahora ha dado una vuelta de tuerca más al negocio on line: aquellos productos pensados para venta en internet y plataformas acaba en una estantería de la tienda que ha abierto en la calle San Pablo 22. The Good Packets ya tiene tienda física.
The Good Packets ha dado una vuelta de tuerca más al negocio on line: productos pensados para la venta en internet y plataformas acaban a la venta en una tienda física
"Llevo un año dando vueltas a la idea porque con la venta en la nave, está lejos, quería acercarlo a otro tipo de cliente que igual no se puede mover hasta allí y en internet no se apaña bien", explica Javier Hernando. Así se configura la tienda de The Good Packets en la calle San Pablo número 22. Los productos son muy diversos establecidos en dos categorías: la pegatina verde que es un producto nuevo que se ha devuelto prácticamente sin tocar y la pegatina amarilla que es como nuevo "un producto que se ha montado pero al colocarlo no es lo que se esperaba, o no entra como se creía al comprarlo y se devuelve". Lo que no van a encontrar en esta tienda física son productos usados. "En tienda no vendo segunda mano, cosas que se devuelven ya usadas, que hay muchas, eso solo lo vendo, una vez revisado y reparado, en plataformas", explica.
Hernando lleva tiempo con perfiles en todas las aplicaciones de venta y revalorización de productos como Vinted, Milanuncios, Wallapop o Correos Market. Sus valoraciones son buenas. Es el sello de calidad en la compra on line. "Intentamos ser rápidos, si pides hoy por la mañana por la tarde se envía, si pides por la tarde al día siguiente ya, nos gusta tener buenas valoraciones en las ventas en red y generar confianza", explica. De comprar palets pasó a acudir a grandes subastas de tráiler cargados de productos. "Tengo una empresa con más de diez años de actividad, soy solvente y como mayorista importador y exportador puedo adquirir tráiler en la multinacional Besotcks y necesitan garantías porque son subastas de 20.000 euros y cuando se cierra tardas dos día sen pagar".
Las ventas de productos de devolución de estos grandes operadores se asemejan mucho a los programas de trasteros de la televisión americana, pero a gran escala. No sabes muy bien lo que compras y son algunas las pistas que te ponen en alerta. Las ofertas salen en la aplicación con el valor de venta al público y el precio de salida de la subasta. "Nada se mueve hasta los últimos 15 minutos no sabes muy bien que productos son solo la descripción general que viene en el manifiesto de carga", explica.
Un reflejo de eso es la gran variedad de productos que se pueden encontrar en The Good Packets donde el eslogan es claro "ven con tu visa y no tengas prisa". Hay juguetes, productos gerontológicos, todo tipo de productos para el bebé, patinetes eléctricos, bicicletas, cintas de correr, grandes electrodomésticos como un frigorífico a pequeños electrodomésticos como una cafetera o una freidora de aire. Ropa de fiesta, de boda, zapatillas de deporte, sudaderas, canoas, herramientas desde manuales a eléctricas y tecnología como relojes digitales, tablets o móviles. "No traigo pantallas ni de televisión ni monitores de ordenador porque en el traslado a veces se fastidian", explica.
La rebaja en esta segunda vida de los productos es interesante. Un producto nuevo presenta un descuento del 20 al 30% del precio al público. Un producto como nuevo, que se ha abierto la caja o se ha montado pero no se ha utilizado el precio se rebaja entre un 30% y un 40%. Si el producto se ha usado aunque se haya devuelto "pero revisado y arreglado en caso de rotura de algún tipo" el descuento es del 40% al 60% sobre el precio original. Aunque estos últimos productos sólo están disponibles en los portales y aplicaciones de venta on line.
The Good Packets dispone de una nave de 500 metros cuadrados donde se recepciona la mercancía y donde se han llevado más de una sorpresa. "Los vestidos de fiesta o de ceremonia con un solo uso, llegan con etiqueta pero se ve que está usado, las zapatillas tienen un nudo específico de fábrica, si no está ya sabes que está usado, pero la gente devuelve cosas muy curiosas: una caja con un patinete eléctrico que al abrirlo está lleno de libros en francés o una máquina de hacer chorizos que se ha usado una vez y, después, se ha devuelto porque hasta grasa llega", dicen.
Por esa razón, todos los productos se someten a revisión. Uno por uno. Cuenta en el almacén con unos 8.000 productos. En el almacén hay una persona que recepciona la mercancía. Cuentan también con un mecánico que "revisa todo para que funcione correctamente, detecta posibles usos" y una dependienta en la nueva tienda de descuento permanente.
La venta de devoluciones de Amazon se ha convertido en tendencia. Uno de los atractivos de la compra en esta plataforma es la facilidad para gestionar las devoluciones, que algunos han perfeccionado hasta rozar el timo. Antes la multinacional del negocio on line lo que hacía era destruir las devoluciones, aunque fueran productos nuevos. Devolvían el dinero al cliente pero la empresa que suministraba los productos al portal asumía el coste de toda la operación. Una denuncia de Greenpace acabó con la exigencia de no destruir productos nuevos y devoluciones sino darles una nueva vida. Así nació el mercado de subastas on line de devoluciones donde hay operadores a gran escala pero también aquellos que optan por comprar palets e ir vendiéndolos en plataformas de segunda mano. "Es una buena manera de buscar un sobresueldo, de la mercancía que compro en Irlanda lo que hago es ofrecer palets a un 30% del precio al público para este tipo de operadores", explica.
En la compra de este material prácticamente a ciegas, hay que asumir posibles pérdidas. Es el riesgo de este unboxing a gran escala. Hernando hace un somero cálculo y apunta que el 33% de lo que llega viene estropeado, y lo tienes que arreglar, otro 33% que llega viene usado, muy usado, vacío o no se corresponde con la etiqueta de la devolución. Y otro 33% sólo tienes que limpiarlo un poco. Es un nuevo negocio que, al contrario de lo que pasaba hasta ahora, nace en la compra virtual del mundo on line y se pasa a la venta física.