Relevo en las facultades de Educación y Humanidades
El rector destacó la importancia de combinar la tecnología con el humanismo y resaltó la necesidad de las humanidades en el avance científico y tecnológico
El rector junto a los nuevos decanos de las facultades de Humanidades y Educación.
Los nuevos decanos de las Facultades de Educación y de Humanidades y Comunicación, María Isabel Luis Rico y Carlos Enrique Pérez González, respectivamente, tomaron posesión este jueves en un acto presidido por el rector en el que mostraron su agradecimiento por la confianza depositada en ellos por sus facultades y el compromiso con la mejora de la calidad y la lealtad institucional.
Carlos Enrique Pérez reafirmó su compromiso y entusiasmo al asumir el cargo como decano de la Facultad de Humanidades y Comunicación y destacó que los retos a los que se enfrenta son “muchos, aunque la fuerza de la Facultad los supera”, aseguró.
En su intervención hizo una encendida defensa de las Humanidades, que han sufrido un descenso del porcentaje de graduados, a las que definió como fundamentales “los estudios humanísticos, culturales y audiovisuales han de permanecer y potenciarse en la enseñanza superior”, ya que contribuyen al desarrollo del pensamiento crítico, atributo irrenunciable en una institución universitaria, opinió.
El nuevo decano también se reafirmó en sus líneas programáticas, como la agrupación de todas las titulaciones de la Facultad en el complejo del Hospital Militar y la solicitud nuevos títulos de grado y posgrado en el campo de los estudios culturales y literarios. Además, pretende potenciar la creación de un Instituto de investigación sobre orígenes del Español y visibilizar y potenciar los estudios humanístico-sociales y patrimoniales como referentes en la investigación científica y esenciales en la generación y comprensión del conocimiento social.
Otro de los ejes de su gestión, explicó, será la transferencia de los resultados de la investigación de la Facultad al tejido socioeconómico autonómico, estableciendo contratos y convenios con empresas e instituciones regionales.
Consolidar la identidad de la Facultad
La nueva decana de la Facultad de Educación, la pedagoga María Isabel Luis Rico, tomó el relevo en el estrado para comprometerse a ejercer su cargo con responsabilidad y lealtad a la institución y destacó el potencial de la Facultad y su implicación en la formación de formadores basada en la calidad y dedicación de sus miembros.
Además resaltó algunas fortalezas como su experiencia investigadora, su capacidad docente y el alto número de alumnado. Una Facultad que conoce bien, como demostró al recordar que “cuando hace ya muchos años cruzaba el umbral de la facultad como alumna para iniciar mi periplo universitario, nada más lejos de mi imaginario estaba que algún día podría llegar a ser decana”.
También anunció que enfocará su gestión en consolidar la identidad de la Facultad fomentando la presencia y participación de la facultad tanto en la comunidad universitaria como en la sociedad civil, trabajando en colaboración con el tejido asociativo, empresarial y educativo del entorno.
Se propone, además, acometer la reforma de las titulaciones desde la participación de todos los sectores implicados de forma consensuada, con la única finalidad de mejorar su calidad en consonancia con la responsabilidad de formar a ciudadanos comprometidos con la sostenibilidad, la innovación y el aprendizaje a lo largo de la vida.
Como señaló en su programa, la nueva decana también trabajará para mejorar las infraestructuras y mobiliario de la Facultad, especialmente la ampliación de la cafetería y dotaciones de aulas y despachos creando espacios para desarrollar las necesidades de la docencia en el ámbito de la innovación y las didácticas específicas como gran proyecto.
Los desafíos de la universidad
Tras agradecer el compromiso y responsabilidad que implica asumir estos cargos, el rector de la Universidad de Burgos, Manuel Pérez Mateos. El rector suscribió las palabras de Carlos Pérez e hizo hincapié en la importancia de combinar la tecnología con el humanismo, resaltando la necesidad de las humanidades en el avance científico y tecnológico. También elogió a la Facultad de Educación y resaltó su crecimiento espectacular, su reconocimiento a nivel nacional y la calidad de la investigación, aunque reconoció desafíos en cuanto a infraestructuras que aún persisten en la facultad.
“La Universidad de Burgos no debe conformarse con ser una institución local, sino que debe contribuir al proyecto común europeo y ofrecer un mejor servicio a los estudiantes y la sociedad”
Pérez Mateos reflexionó sobre el reto de la internacionalización como una oportunidad para el desarrollo y el intercambio de conocimientos entre instituciones, como ya está haciendo la UBU al integrarse en la Universidad Europea RUN-EU. “La Universidad de Burgos no debe conformarse con ser una institución local, sino que debe contribuir al proyecto común europeo y ofrecer un mejor servicio a los estudiantes y la sociedad”, afirmó.
La responsabilidad social de la universidad también tuvo cabida en el discurso del rector que destacó la importancia de transmitir valores fundamentales como la inclusión, la diversidad, la igualdad y la cultura.