Violencia de Género
Bina, una vida «llena de penurias»
Ante el caso de la mujer que se suicidó tras un presunto episodio de violencia de género, Virgina Barcones hizo un llamamiento «a la denuncia, dar el paso, cuando creáis que no tenéis escapatoria, la hay y estamos aquí para ayudaros»
La hermana de la joven se abraza con una mujer en la concentración.
El caso deBina, la chica de 20 años que se suicidó tras un presunto episodio de violencia de género este fin de semana, está en vía judicial. «Es la autoridad judicial la que tiene que proseguir con las actuaciones, informamos de lo que aconteció en cada momento», aclaró la Delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones.
Relató que la secuencia de los hechos fue que «se han transmitido con total transparencia». En primer lugar se da cuenta de un hecho con una mujer fallecida y con su pareja detenido aunque «no estaba clara la situación» y una autopsia posterior que «ha determinado la causa de la muerte que no tiene que ver con el detenido pero que también ha determinado que la mujer fallecida tenía traumatismos y se le procedió a detener por violencia de género retirando lo referente al homicidio», explicó Barcones.
Sobre Miguel A. Z., de 42 años y pareja de la mujer de 20, aseguró que «la autoridad judicial en el día de ayer determinó su libertad con cargos de violencia de género». Aunque fuentes judiciales precisan que el detenido fue puesto en libertad por la Policía. Los Juzgados están a la espera de «recibir el atestado policial para determinar las diligencias de investigación que se consideren oportunas».
Lamentó la delegada del Gobierno la situación de Bina, una mujer que «tuvo una vida llena de penurias, de maltrato y que, lamentablemente, siendo tan joven, haya tenido un final tan dramático». Reconoció que hay personas «especialmente mujeres, que en esta vida no han tenido ninguna oportunidad» con quienes la Administración «no ha sido eficaz a la hora de ayudarlas a salir de esas situaciones de violencia, de penuria, de desgracia que las han acompañado a lo largo de toda la vida».
Virginia Barcones ratificó el «compromiso más firme que nunca para erradicar la violencia de género que existe y en muchas formas y manifestaciones y que destruye la vida de muchísimas mujeres». Apeló por un lado a las administraciones «para dar un paso al frente y avanzar en la protección y jamás retroceder». Y a las mujeres que sufran situaciones de violencia de género. «Decírnoslo, dar el paso, entrar en una comisaría de Policía Nacional, entrar en un cuartel de la Guardia Civil, llamar a los teléfonos (016) que no dejan rastro, que no dejan huella, decirnos lo que necesitáis y os ayudaremos».
El caso de Bina es sintomático de aquellas situaciones a las que no se llega, y donde las víctimas se ven sin salida, sin opciones a pesar de tener toda la vida por delante. Barcones recordó que «sí hay salida, para eso estamos, para ayudaros, para protegeros, para daros la mano», añadió.
827 mujeres bajo el radar de Viogén
La joven de origen rumano estaba en el radar Viogén. El sistema de alerta y seguimiento de casos de violencia de género que coordina a agentes de los diferentes cuerpos de seguridad del Estado y de la administración local. La red Viogén mantiene seguimiento activo a 827 mujeres víctimas de violencia de género en los que nueve tienen un riesgo alto y 133 medio. Del total de casos activos con seguimiento de Guardia, Civil, Policía Nacional y Policía Local 144 implican también a menores.
De los casos registrados en la red Viogén, según los últimos datos ofrecidos, en diez las víctimas no han cumplido los 18 años. En 208 casos están entre los 18 y los 30 años. La franja de edad más numerosa está entre los 31 y los 45 años con 386 casos activos. Entre 46 y 64 años con 208 las mujeres con seguimiento por parte de agentes de Guardia Civil, Policía Nacional o Policía Local. La opresión de la mujer no cesa con la jubilación. Hay 15 mujeres con más de 65 años y en situación de riesgo por violencia de género.
En total son 4.879 mujeres que han estado bajo vigilancia de agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado por riesgo ante violencia ejercida por su pareja desde que se ha puesto en marcha el sistema de seguimiento. Cifras con la que la delegada del Gobierno en Castilla y León ha querido dejar claro que «la violencia machista existe, la violencia de género existe, nos maltratan, nos matan por el hecho de ser mujeres, no demos ni un solo paso atrás, no cometamos la irresponsabilidad de dejar grietas para el amparo de los agresores».