El ritmo de creación de empleo en junio está en cifras de hace 15 años

Junio es un buen mes para el empleo. La actividad, especialmente al sector más empleador como es el de Servicios, se dispara. Y se nota en las cifras de parados. Ésta se ha reducido en 592 personas en los últimos 30 días y alcanza cifras pre-crisis de hace 15 años.

13.759 burgaleses no tienen empleo. Es una cifra que para encontrarla hay que mirar a los datos de empleo de 2008 cuando se registraron 13.322 parados. Un año después la crisis económica hacía estragos y en un año se había subido hasta los 21.970 parados. Quizás lo más positivo sea la estabilidad que viene marcada por la variación mes a mes. El número de nuevos empleos generado en los últimos 30 días no es de los más altos. Son 592 personas quienes han encontrado empleo, un 4,13% de variación mensual. Mayo fue considerado uno de los mejores meses desde 2005, el último que refleja la estadística. Es la variación mensual más baja desde 2005 cuando el paro se situaba en 11.682 personas en la provincia. Este variación más exigua determina que la volatilidad del empleo es más baja porque contrato que se firma, se mantiene en el tiempo.

Por sectores, el que tira del empleo sigue siendo el sector Servicios. Así se plantea en las cifras del mes pasado donde precisamente este sector ha registrado prácticamente la mitad de las incorporaciones al mercado laboral. En concreto 294 personas ha empleado un área de actividad marcada por la temporada alta en el turismo y la hostelería y el mayor flujo de ventas con las rebajas o el reparto de paquetería. Aún así son 9.539 los desempleados del sector. Por sectores, el que más empleo también ha generado es agricultura. Son 25 parados menos y alcanza los 587 desempleados. En realidad todos los sectores han generado nuevos puestos de trabajo en el último mes. Industria se queda en 1.663 parados, 12 menos. En construcción alcanzan los 900 parados, dos menos, en un mes en el que la actividad es muy alta.

Lo que si crece en el último mes es la dificultad del acceso al mercado laboral o reengancharse tras más de dos años en desempleo. Son 1.070 los burgaleses en esta situación. Unos 20 más que en mayo pero un 12,6% menos que en 2019. En cuanto al empleo juvenil, Burgos alcanza buenos registros. Hay 869 menores de 25 años en búsqueda de empleo. Son 554 menos que en el mes de mayo qn el que había 1.423 jóvenes en esta situación. El verano es un buen momento para esos empleos en vacaciones para jóvenes estudiantes. Aunque es la cifra más baja en un mes de junio desde 2005. También el número de vecinos menores de 25 años baja en clara sintonía con el fenómeno de la despoblación.

Lo que se mantiene inmutable con el paso del tiempo es el peso de la brecha de género en el acceso al empleo. Unas décimas arriba, unas décimas abajo, en tiempos de bonanza y en tiempos de crisis, ellas son más en las listas del paro. La proporción que se mantiene desde hace veinte años es que por cuatro hombres parados hay seis mujeres sin empleo. En el mes de junio ellas son 8.232 trabajadoras en paro. Ellos son 5.527. La cifra en ellas ha caído un 4%, son 349 paradas menos. El número en ellos ha caído un 4,2% son 243 parados menos. La brecha se estrecha en tiempos de crisis. Cuando el impacto de la económica arrasó el mercado laboral, en 2013, la diferencia entre hombres y mujeres era mínima. En ellos el paro afectaba a 14.449 personas. En ellas, 16.378. A penas un millar les separaba. En la crisis sanitaria de 2020 ellos bajaron en 3.000 parados en un año y ellas en 3.500. La recuperación en ellos siempre es más rápida. Si miramos los datos de este mes de junio con los del mismo mes del año del confinamiento por el coronavirus, vemos que ellos se recuperan mejor de los estragos de la covid-19 en el empleo. El paro en ellos ha bajado un 43,3% respecto a aquel junio de 2020 con 9.758 desempleados varones. El desempleo en ellas ha bajado un 35% respecto a junio de 2020 en el que alcanzaron 12.659 paradas.