El PSOE ve «surreal» renunciar al Mercado Norte sin un aval técnico

L. BRIONES BURGOS

De «surreal» tilda el exalcalde y actual líder de la oposición en el Ayuntamiento de Burgos, Daniel de la Rosa, la decisión del equipo de Gobierno de renunciar al proyecto del nuevo Mercado Norte. Sorprendido por las críticas a la iniciativa y por los cálculos, a su juicio sin fundamento, del aumento del coste, el edil socialista reconocía su estupor al conocer la apuesta de Cristina Ayala de empezar de cero.

«Van a tirar a la basura el trabajo de cuatro años y lo hacen sin hablar con nadie, sin reunirse con el equipo redactor del proyecto o con los trabajadores municipales responsables de su tramitación sin un solo informe técnico o jurídico que justifique esa decisión», lamenta, para rogar a su sucesora al frente del Consistorio que «rectifique». Insiste al respecto en proponer -tal y como hizo la semana pasada, antes incluso de conocer que el bipartito PP-Vox desistirá de la actual iniciativa- una actualización de los precios (que bien podría elevar el coste final, según el PSOE, por encima de los 23 millones dado el encarecimiento de los materiales) y la modificación del proyecto vía contrato menor y el traslado de un nuevo expediente, esta vez completo, a la Oficina Nacional de Evaluación. «Tenemos instrumentos para encontrar una solución por un coste razonable», explica De la Rosa, para cifrar en casi tres millones de euros las pérdidas que supondrá la renuncia anunciada.

En concreto, se ha referido a los 406.915 euros ya abonados en facturas vinculadas con la redacción del proyecto «a los que habría que sumar la ayuda de la Junta de Castilla y León de 2,4 millones concedida este mismo año para la ejecución de las obras».

No obstante, lo que a juicio del portavoz del PSOE resulta más llamativo es que se ponga en entredicho un proyecto que «lejos de ser socialista fue adjudicado por el PP, con Javier Lacalle al frente del Gobierno, el 27 de diciembre de 2018». Contaba, eso sí, con el consenso del resto de grupos municipales para hacerlo, lo que en opinión de De la Rosa «evidencia que es una apuesta de ciudad».

Considera además que «lo que para el PP es sobredimensionado para nosotros es lo suficiente mente ambicioso para jugar, por fin, en primera división y ser el revulsivo que la ciudad necesita».

En ese mismo sentido se pronuncia el también concejal socialista, Julián Vesga, buen conocedor del tema tras su dilatada experiencia en la directiva de la Federación de Empresarios de Comercio.

«Es curioso que el nuevo PP paralice un proyecto del otro PP», subraya para insistir en la necesidad de documentos jurídicos que avalen desistir de una iniciativa «valiente, que buscaba convertir a Burgos en un referente, con una dotación moderna que suponía también una transformación urbanística del entorno». «¿Con quién han hablado para tomar esta medida? Con nadie. Estoy seguro de que los actuales concesionaros comparten nuestra tristeza al ver cómo se va a parar un proyecto que les ilusiona», añadía Vesga.

Para paliar esa «falta de información y diálogo» de la que acusan al bipartito, Vesga reclama el edil Raúl Martínez la convocatoria urgente de una comisión de Comercio a la que, además, se invite al equipo redactor del proyecto y a los concesionarios actuales del Mercado Norte. «Sería el lugar indicado para que nos explique el criterio que se ha seguido en este caso», apostilla.

Por su parte, Daniel de la Rosa estima que, de consumarse el anuncio de Cristina Ayala y tener que empezar de cero pasarán entre cuatro y ocho años más hasta que Burgos pueda contar con un nuevo espacio comercial junto a Plaza España.