Pineda de la Sierra. A ras del cielo
Esta localidad burgalesa es una de las villas más altas de la Sierra de la Demanda
Pineda de la Sierra es un municipio y localidad de la provincia de Burgos que dista de la capital a 50 kilómetros dirección sureste. Con apenas 100 habitantes, Pineda se encuentra a 1205 metros del nivel del mar, lo que la convierte en una de la villas con más altitud de la Sierra de la Demanda. Forma parte de la Comarca de Pinares y La Demanda y se sitúa en plena Sierra del Mencilla. Se enclava entre el Torruco y el Mencilla -dos de las montañas más altas de la provincia- y por la villa pasa el río Arlanzón, que nace a pocos kilómetros del término municipal.
Debido a su altitud geográfica, Pineda de la Sierra goza de un clima montañoso, en el que los inviernos son fríos y las precipitaciones son abundantes. En verano, las temperaturas son suaves y las lluvias escasas. Esto la convierte en un excelente punto de partida para la realización de excursiones en dirección a las sierras de Demanda y Mencilla, así como por la Vía Verde de la Demanda, que atraviesa el pueblo.
Orígenes
Pineda de la Sierra es uno de los pueblos castellanos más históricos. Se formó tras la caída del Antiguo Régimen y desde su origen, la jurisdicción de la villa de Pineda permaneció bajo la tutela regia, como queda confirmado en los fueros realizados por el rey Alfonso VII en el año 1136.
Más adelante, perteneció a la Intendencia de Burgos entre los años 1785 y 1833 con jurisdicción de realengo -con alcalde ordinario- tal y como se recoge en el Censo de Floridablanca de 1787. Según este manuscrito, fue Don Sancho quien pobló esta zona y le dio términos a finales del siglo X.
Las típicas casonas de Pineda
Los 69 kilómetros cuadrados de superficie de Pineda de la Sierra abrazan numerosas casonas que dan forma a la villa. Estas, se mandaron construir por los ricos señores ganaderos que se iban estableciendo en la villa a lo largo de la histora. De esta manera, Pineda siempre ha sido el núcleo fundamental de la ganadería trashumante de la zona.
Las mencionadas casas son edificios de gran solidez y sobriedad en sus formas. Su color rojo intenso proviene de los sillares de arenisca que se encuentran en el entorno de la villa. Pineda también cuenta con algunas de las típicas casas serranas que destacan por sus características chimeneas troncocónicas encestadas.
Iglesia de San Esteban Protomártir
En Pineda se conserva un único monumento antes de que fuera un municipio independiente. Hablamos de la iglesia de San Esteban Protomártir. Este edificio fue restaurado casi por completo y sólo se conserva de la original construcción el ábside, parte de los muros y una preciosa galería porticada. El resto del edificio y la torre responden a una transformación posterior. La iglesia fue declarada bien de Interés Cultural en 1983.
La portada es una de las partes más interesantes ya que está formada por una serie de arquivoltas molduradas por baquetones. Dicha parte del edificio se construyó en el segundo tercio del siglo XII. Tiene una rica decoración escultórica en sus capiteles: dos toscos grifos y arpías afrontadas; un centauro que dispara su arco contra una sirena de larga cabellera; lucha de hombre y león, etc.
Otro de los puntos de gran interés de la iglesia es su galería porticada, que se adosa al lado meridional del templo. Ésta, es uno de los mejores ejemplos de la tipología arquitectónica de la segunda mitad del siglo XII por la zona occidental de la cuenca castellana del Duero y de provincias próximas.