6 ofertas de trabajo por alumno para los titulados en la Escuela de Hostelería

44 alumnos recién titulados en los grados del Centro Integrado de Formación Profesional de La Flora, en distintos estudios relacionados con la hostelería y el turismo y hasta 255 ofertas de trabajo en la bolsa de empleo que llega a esta misma escuela.

Con estas dos cifras se pueden constatar dos cuestiones. Por un lado, que el porcentaje de inserción laboral de los estudiantes es prácticamente del 100% siempre que su deseo sea trabajar. Por otro, que la hostelería lo sigue teniendo difícil en el caso de que los empresarios quieran incorporar a sus negocios a gente bien formada. Los recién titulados tienen de media casi seis ofertas por persona para elegir empleo.

El director del CIFP La Flora, Óscar Carbonell Carqués, que mira por sus estudiantes asegura que «no nos podemos quejar» en cuanto a la inserción laboral porque «seguimos batiendo récords de ofertas laborales». Llegan hasta de otros países, aunque la mayoría son para la ciudad.

«Todo el que quiere trabajar no tiene problema e incluso hay alumnos que se ponen a trabajar antes de haber terminado», explica Carbonell, que añade que desde el centro siempre se anima a los estudiantes a concluir la formación para «elegir los establecimientos y las mejores ofertas en función de su etapa vital».

Hay alumnos que desean probar la experiencia del trabajo y algunos ciclos formativos que se cursan en dos años se alargan a tres, porque la conciliación entre estudios y vida laboral no siempre es fácil. Pero desde la escuela consideran que obtener el título también es un aliciente para acceder a mejores condiciones laborales.

«Todo el que quiere trabajar no tiene problema e incluso hay alumnos que se ponen a trabajar antes de haber terminado»Óscar Carbonell, director de CIFP La Flora

Este año se ha titulado el 70% de los alumnos que finalizaban el segundo curso de ciclos los formativos, un porcentaje que está entre los más altos de los últimos años y por el que el director se muestra orgulloso de estos resultados del alumnado. «El histórico de titulados en los 16 años de escuela está en un 58 o 60%, pero es cierto que cada vez conseguimos que se gradúen más estudiantes», explica.

Este dato no quiere decir que el resto abandone los estudios sino que puede tardar otro año o dos más por motivos laborales en la mayoría de los casos.

CIFP La Flora ofrece grados medios y superiores de FP y los de cocina son los que mejores datos de matriculación obtienen cada año. Está el medio de Cocina y Gastronomía y el superior de Dirección de Cocina, que suelen quedarse con gente en lista de espera. Pero también obtienen buenos números el grado medio en Servicios de Restauración, así como el superior en Gestión de Alojamientos Turísticos, ambos han vuelto a las cifras de antes de la pandemia.

«Tenemos chavales jóvenes que están motivados y con ganas de aprender porque cuanta más especialización tengan mejor, la profesión no es solo poner cañas», explica este docente, que comenta algunas técnicas que se aprenden para ser baristas, cocteleros o sumilleres.

En este sentido, Carbonell destaca la amplia variedad de profesionales de la ciudad que les apoyan en esta formación que va más allá del estricto currículum académico. «La Federación de Hostelería nos respalda y acompaña en el objetivo de hacer una restauración de calidad que es lo que hay que poner en valor en Burgos», precisa y comenta la importancia de valorar en su justa medida el trabajo que realizan los empleados del sector. Así, es consciente de que hay ofertas de empleo que no cumplen unos mínimos, pero es partidario de poner el énfasis en «valorar la importancia del buen servicio».

Desde la escuela, llaman la atención sobre el hecho de que el sector de la restauración trabaja ligado al ocio y al turismo y, por tanto si se quiere potenciar el desarrollo de la ciudad en estos ámbitos es imprescindible contar con los mejores profesionales.

Titulaciones con más éxito

Los dos ciclos de cocina, el medio y el superior, se inician cada curso con 30 alumnos cada uno de ellos que es el máximo de plazas. Mientras, el de gestión de alojamientos alcanza una matrícula de entre 15 y 20 estudiantes y el de servicios de restauración, unos 15 de media cada curso.

La escuela, con entre 180 y 200 matriculados, no se ha planteado aumentar el número de alumnos para atender las demandas del mercado laboral porque existe otra escuela concertada, María Madre, que también dispone de este tipo de ramas formativas.

Carbonell opina que «no es necesario saturar el mercado, aunque haya una falta de profesionales tiene que haber un equilibrio entre oferta y demanda».

Nuevos ciclos 2023/2024

Para el próximo curso La Flora va a estrenar el grado medio en Panadería, Repostería y Confitería y el grado superior de Guías, Información y Asistencias Turísticas, que es un complemento al de Gestión de alojamientos turísticos.

Estos dos ciclos, ambos de grado superior y con 24 plazas ofertadas cada uno de ellos, se pueden cursar de manera conjunta en tres años como ha planificado el centro, puesto que un curso es convalidable. «Es una doble titulación», concreta el director, que señala que las expectativas de matrícula son buenas porque pueden tener «buenas salidas laborales».

Los nuevos ciclos se van a cursar en horario de tarde, puesto que por la mañana prácticamente no hay espacio en el centro. A partir de enero, aunque la matrícula comenzará en septiembre, volverá el curso de especialización en Panadería y Bollería artesanales. Esta actividad formativa está pensada para los titulados de grado medio de Cocina y grado superior de Dirección de Cocina