Cerrar

Mucho más que unas vacaciones

Tras un viaje más largo de lo previsto, recalan en la ciudad los 17 niños saharauis que disfrutarán de un verano lejos de los rigores del desierto, pero al 'calor' de familias burgalesas

Imagen de los niños saharauis en el aeropuerto de Valladolid.ECB

Publicado por
Burgos

Creado:

Actualizado:

Ni a las tres, ni a la seis y media. Pasaban las siete de la tarde y arreciaba el fresco típico local cuando han recalado en la ciudad los 17 niños y niñas saharauis que llegan dispuestos a pasar unas 'Vacaciones en paz'. Así se llama el programa que les permite disfrutar de un verano lejos de los rigores del desierto, al 'calor' del hogar de familias burgalesas dispuestas a que sea una experiencia memorable.

Suele ocurrir, de hecho. Eso se deduce al menos de la gran cantidad de repetidores que hay cada año, tanto menores como 'casas' de acogida. Apenas tres niños y seis familias se estrenan este año. Dos d las 19 fichadas, eso sí, se quedaban con las ganas pues en el último momento la organización informó que viajaban 17. "No es la primera vez que pasa y contamos con ello", explica la presidenta de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui en Burgos, Beatriz Arreba, horas antes del encuentro a las puertas de su sede local.

Junto al envío de contenedores repletos de material de interés a los campos de refugiados de Tinduf, esta acogida estival es la actividad estrella de la agrupación desde 1997. Solo la pandemia la frenó durante los veranos de 2020 y 2021 y los esfuerzos que cada año emplean en encontrar familias que colaboren siempre dan fruto. "Hay mucho interés. Lo malo es que conocemos las fechas definitivas con poca antelación y hay quien no se puede implicar porque necesita planificar estos meses con tiempo", explica Arreba, para destacar que algunas de los hogares que participan en esta ocasión probaron ya hace años y después de un largo periodo se han vuelto a animar".

La agrupación local, por tanto, está  muy satisfecha con la respuesta de los burgaleses a una iniciativa que coordina la Delegación Saharaui de Castilla y León. 

El plan previsto para el tiempo que permanezcan en la provincia los menores -hasta el 1 de septiembre- es el "tradicional": autoridades, médicos, piscina y convivencia. 

En concreto, Arreba explica que esperan visitar el Ayuntamiento y la Diputación de Burgos la próxima semana, el mismo día a ser posible para culminar la jornada con un tiempo compartido por todos los participantes. Habrá otro encuentro más adelante en Piedrahita de Muño, con jaima incluida.

Los niños podrán refrescarse en las piscinas municipales pues tienen la entrada gratuita durante su estancia y se someterán a varias revisiones médicas que sus familias de origen celebran como la gran suerte de este programa.

"Cada familia se compromete a acudir al pediatra de su centro de salud para un chequeo general", indica la presidenta de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui. De sus dientes se encargará el doctor Martín en Policlinic Center, Alter Audio colabora con la causa estudiando su salud auditiva, en riesgo por el viento y la arena con los que conviven en pleno desierto argelino, y la clínica Baviera hará lo propio con la vista. "Si necesitan gafas contamos con el apoyo de las ópticas integradas en la Fundación Cione Ruta de la Luz", añade Arreba.

A garantizar el disfrute se comprometen las familias que los recibían con los brazos abiertos para brindar a estos menores -que crecen, recordemos, en un campo de refugiados, es decir, en un entorno hostil no solo por el clima-, mucho más que unas vacaciones al uso: una oportunidad, nuevas experiencias y un vínculo. 

En el conjunto de Castilla y León, se acogerán entre los meses de julio y agosto 140 niños saharauis de entre 7 y 12 años.