Sasamón. La villa milenaria que fue historia de Roma
Muchos siglos de historia y unos cuantos elementos patrimoniales de gran interés hacen de esta localidad una de las más bellas e interesantes de la provincia de Burgos
La localidad de Sasamón se encuentra a la izquierda del río Brullés. Cuenta con cerca mil habitantes y se sitúa a 40 kilómetros dirección oeste de la capital de la provincia.
Denominada en la época del emperador Augusto como Segisama Iulia, Sasamón perteneció a la región de los turmódigos y fue sede de la Legio IV Macedónica, una legión romana combativa. Debido a la importancia estratégica de la villa, por Sasamón transitaba una calzada romana que conectaba Caesaraugusta -hoy Zaragoza- con Austurica Augusta -Astorga-. Actualmente se conservan algunos vestigios de esta época.
La riqueza histórica de Sasamón también se ve reflejada en su patrimonio, donde destacan algunos monumentos y lugares como los que se indican a continuación.
Iglesia Santa María La Real
Este templo se construyó entre los siglos XII y XVII. La antigua edificación se sustituyó por la actual a mediados del siglo XIII gracias a las donaciones de Alfonso VII. Su estilo predominante es el gótico pero posee elementos del románico. Tiene una magnífica portada gótica que es una réplica de la del Sarmental de la Catedral de Burgos. Su interior se distribuye en cinco naves con crucero y claustro adosado.
Esta iglesia custodia valiosos retablos de notable interés como el retablo de los Santos Juanes o el de Santiago, atribuido al taller de Felipe Bigarny. La sacristía conserva la cajonería del siglo XVIII. Es un templo de amplias dimensiones y se ha catalogado como el tercer monumento más grande de la provincia de Burgos.
Arco de San Miguel de Mazarreros
Se encuentra a un kilómetro de la villa siguiendo la carretera BU-610 que conecta Alar del Rey -Palencia- con Sasamón. Se trata de la portada que formó parte de la iglesia parroquial de San Miguel de Mazarreros y es el único vestigio que se mantiene en pie de este templo y del pueblo que desapareció en el siglo XV tras ser anexionado a Sasamón.
La sencillez de su arquitectura y la pureza de sus piedras crean estampas de gran belleza y magia a su entorno. La portada combina con maestría los estilos románico y gótico a pesar de haber sufrido el paso del tiempo, el abandono y el expolio. Este arco es uno de los monumentos que se encuentran actualmente en peligro de ruina de la provincia de Burgos según la Lista Roja de Hispania Nostra.
Ermita de San Isidro y Cruz del Humilladero
La ermita de San Isidro se ubica a las afueras de Sasamón, muy cerca de las piscinas, y alberga la majestuosa Cruz del Humilladero. Esta pieza es considerada el ejemplo más impresionante y opulento de los antiguos cruceros hispánicos y se estima que fue erigida alrededor de 1500, asociándose al círculo artístico de Simón de Colonia. Su diseño cuenta la historia de la Salvación y la Redención del ser humano mediante la muerte de Cristo, desde el pecado original hasta la Coronación de la Virgen.
Casa Museo de Salaguti
Carlos Salazar Gutiérrez, también conocido como Salaguti, es un auténtico autodidacta. Nació en esta villa en 1944 y desde entonces ha tenido la necesidad de volcar su vida a las artes plásticas. En 1962 fue rechazado para entrar en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando, en Madrid, hecho que lo motivó a dedicarse al mundo del arte por su cuenta.
Hoy en día, vive en una casa-estudio muy cerca del caserío de Sasamón, espacio donde el artista realiza la totalidad de su obra y trabajo. Es un edificio que sorprende al visitante no sólo por la originalidad de la construcción, ya que todo el es una gran escultura, sino por sentir la sensación de espacio que infunde su interior a todo el que se adentra en su interior. Un detalle que destaca de la Casa-Museo Salaguti es su fachada, que es un auto retrato del autor.