ENTREVISTA
Ángel Manzanedo: «No podemos resolver en 15 días todo lo que no se ha hecho en años anteriores»
Concejal de Hacienda, Contratación y Patrimonio en el Ayuntamiento de Burgos. Perfil técnico para gestionar las arcas públicas, con dotes de liderazgo y dispuesto a «escuchar». Se estrena en política por la «ilusión», «entusiasmo» e «insistencia» que le transmitió Cristina Ayala
Todavía compagina su cargo como concejal, en el que lleva poco más de un mes, con su trabajo como gerente de Banca Personal Digital en Ibercaja. Pronto asumirá la dedicación exclusiva, pero no le ha quedado más remedio que ponerse las pilas aún estando de vacaciones. Con una cartera tan amplia que se extiende hasta un departamento tan complejo como el de Personal, codo con codo con la edil delegada, Yolanda Barriuso, el aterrizaje ha sido «más duro de lo que pensaba». Aún así, recogió el guante que en su día le lanzó quien acabaría siendo alcaldesa con el objetivo de aportar su «granito de arena» para que «Burgos prospere». Sin prisa pero sin pausa, porque el cortoplacismo no va con él, espera que su bagaje profesional en la empresa privada sea de utilidad para el Ayuntamiento.
Pregunta- ¿Ha sido duro el aterrizaje?
Respuesta- Ha sido más duro de lo que pensaba porque además del área de Hacienda asumo Contratación, Patrimonio e Industria, con lo cual se ha ampliado aún más la responsabilidad. Por lo tanto, todavía estamos aterrizando.
P.- ¿Qué esperaba encontrar y qué es lo que realmente se ha encontrado?
R.- Lo primero que me he encontrado es con el personal de este área. Con muy buena voluntad, predisposición y unos técnicos excepcionales. Eso es un paso muy importante para el desarrollo de cualquier tipo de gestión del Gobierno.
«Quiero ser un actor principal en este equipo de Gobierno»
P.- ¿Por qué aceptó el ofrecimiento del Partido Popular para formar parte de su lista?
R.- Fue a raíz de una conversación que tuve con Cristina Ayala. Su decisión, su ímpetu, sus ganas, su ilusión... Vi cómo desarrollaba los proyectos, cómo los planteaba con ese entusiasmo. Me contagió su espíritu de hacer algo por esta ciudad.
También me motivó ese espíritu de incentivar a la ciudad para que no se quede atrás. Tengo dos hijos, mellizos de 11 años, y quiero que tengan la oportunidad de estudiar fuera si ellos quieren, pero también de que puedan volver a trabajar a Burgos, que es lo que necesitamos. Siempre se ha dicho que Burgos es una ciudad encantadora para residir, la gente así lo constata en los medios de comunicación, pero nosotros lo que queremos es que nuestros hijos tengan esa oportunidad para que Burgos prospere.
Por eso acepté el reto que me lanzó Cristina. Por su ilusión, entusiasmo y esa insistencia que pone en todos los proyectos.
P.- ¿Fue un ‘sí’ inmediato o necesitó un tiempo para pensárselo?
R.- Era una decisión que requiere mucho análisis por lo que viene a posteriori. Pero le dije que sí por la transmisión de esa fuerza, ímpetu e ilusión que tenía Cristina, además con las ideas muy claras. Me pidió que le ayudara en este camino, en esta singladura, y no me costó mucho decirle que sí. También, como decía, porque quiero hacer algo por mis hijos y los hijos de todos los burgaleses. Quiero aportar ese granito de arena y no quejarnos solamente de ciertas circunstancias. Quiero ser un actor principal en este equipo de Gobierno con Cristina Ayala a la cabeza.
P.- Dada su trayectoria profesional, supongo que estaba cantado cuál sería su cometido en caso de llegar al equipo de Gobierno.
R.- Lo que ha hecho Cristina Ayala es juntarse con gente muy válida y muy especializada en cada área. Sí que es verdad que no se habló en un primer momento sobre qué áreas íbamos a llevar, aunque Cristina ya lo tenía todo estructurado y bien diversificado en su cabeza. Lo que hubo luego fueron añadidos al área que iba a llevar para tener esa confluencia y no dispersión de diferentes áreas y concejalías.
¿El reto es importante? Sí. ¿Ilusionante? Evidentemente. ¿Responsable? Conlleva mucha responsabilidad. Esperemos que todo se desarrolle tal como se ha fijado en este camino de largo recorrido. Porque no es un proyecto cortoplacista, sino un modelo de desarrollo de ciudad a medio y largo plazo.
P.- Analizando los perfiles en cada área del Ejecutivo, da la impresión de que se ha configurado un equipo muy tecnócrata.
R.- Se han escogido unos perfiles muy técnicos para cada área. Lo comprobé en precampaña y me parece un equipo muy válido para hacer cosas grandes en esta ciudad al margen de las derivadas políticas que puedan plantearse. Lo que vamos a hacer es dedicarnos exclusivamente al desarrollo técnico.
«Personal es una patata caliente y también una acción prioritaria»
P.- ¿En qué se parece y en qué se diferencia gestionar una entidad bancaria de las arcas públicas?
R.- Más que una entidad bancaria, me inclinaría más por hablar de empresa privada. La diferencia entre una empresa privada y una empresa pública es la excesiva burocracia administrativa, con procesos muy largos en el tiempo. Aquí no puedes hacer algo que la empresa privada puede desarrollar en muy poco tiempo porque los plazos los determina la Administración pública. No es que sea una barrera, pero sí un contratiempo para hacer cosas de forma muy seguida porque se requiere un proceso más espacioso.
P.- Se supone que la Administración Electrónica viene a agilizar todos esos procesos.
R.- La Administración Electrónica es un avance muy importante, porque antes todos los expedientes se acumulaban en papeles de lectura tediosa. Es verdad que en la Administración Electrónica enseguida ves un expediente y los informes bien concatenados. Pero a lo que yo me refiero es al tiempo que transcurre desde que se inicia un expediente hasta su ejecución. Esos plazos se tendrían que haber reducido, aunque es algo que no compete ni a mi área ni a este tipo de gobiernos.
P.- También le toca lidiar en Personal, toda una patata caliente.
R.- Es una patata caliente y también una acción prioritaria. Aquí en Personal no se ha hecho nada, hay muchas carencias. No hablamos solamente de Policía y Bomberos, sino también a nivel administrativo, de técnicos e incluso de seguridad jurídica. Pero bueno, es lo que hay y tengo la gran suerte de contar con la Concejalía delegada en Yolanda Barriuso, que es una gran profesional. La ayuda de Yolanda es inestimable y hay una colaboración potente. Además, he sido -y soy, de momento- delegado de Personal de un sindicato, con lo cual tengo esa doble faceta desde el punto de vista de la mal llamada patronal. Por lo tanto, sé como hacer que esa coordinación sea efectiva entre las dos partes. Sobre todo cuando existe una discrepancia entre lo que uno pide y lo que los sindicatos solicitan.
P.- ¿Se han iniciado conversaciones con las plantillas municipales más reivindicativas? Por ejemplo, con las trabajadoras sociales.
R.- Hemos iniciado una relación global. Lo primero que hicimos, después de la investidura, fue presentarnos a todos los equipos. Y pedimos un informe a todos los jefes de sección sobre sus necesidades y dónde se puede mejorar. A partir de ahí vamos a ir avanzando en ese proceso evolutivo para abordar las necesidades del personal.
P.- En clave económica, ¿cuáles son sus principales objetivos a corto plazo?
R.- El corto plazo es hacer un presupuesto del año 2024 acorde a las necesidades de lo que queremos hacer y cumplir nuestro programa electoral al cien por cien. Ese es nuestro objetivo principal. Es verdad que hay acciones de programación que no se van a ejecutar en el corto plazo, pero vamos a iniciarlas cuanto antes por lo que decía antes de los tiempos administrativos. Que no pase, como en la anterior legislatura, que se ha esperado hasta el último momento para hacer cosas que al final no han sido posibles de realizar.
Nuestro objetivo es, desde el primer momento, tomar conciencia del estado de situación. Y tener la valoración de Intervención a 30 de junio, aunque quizá la tengamos que estudiar un poco más en detenimiento para ver dónde podemos incidir, para incluir nuestras propuestas dentro del presupuesto. Al final, el presupuesto es la imagen fiel de lo que quieres realizar.
P.- ¿A cuánto asciende a día de hoy el nivel de endeudamiento del Ayuntamiento?
R.- Actualmente no tengo los datos, pero lo que sí puedo decir es que el nivel de endeudamiento es inferior al 100%, con lo cual no hay ningún problema. De momento, nos hemos dedicado principalmente al tema de Personal. Porque sin los técnicos, sin los trabajadores, el Ayuntamiento no se puede desarrollar. Tenemos que poner las armas necesarias y el material suficiente para que podamos ayudarnos mutuamente.
P.- ¿Qué recetas barajan para ir reduciendo paulatinamente ese nivel de endeudamiento?
R.- Tenemos que hacer un estudio para valorarlo, porque hasta ahora no había un control de gasto. Teníamos barra libre con todo lo que ha sucedido, el Gobierno decidió no realizar ese control de gasto que nos hubiese permitido amortizar la deuda que arrastramos aunque la llevemos bien amortizada. Podríamos hacer hecho amortizaciones anticipadas. En este sentido, de momento lo estamos valorando.
«Hay que reducir el periodo medio de pago lo máximo posible»
P.- El pago a proveedores y sus plazos, otra asignatura pendiente.
R.- Todo va concatenado. Necesitamos personal para esa gestión tributaria y nos vamos a poner manos a la obra para que ese periodo medio de pago se reduzca lo máximo posible. No puede ser de otra manera.
P.- Digo yo que, nada más llegar, se encontraría un gran volumen de facturas.
R.- Me ha sorprendido mucho. Me fui de vacaciones y dije que se las debía a mi familia, pero estuve todo el rato con el teléfono del Ayuntamiento y gracias a la Administración Electrónica he podido resolver ciertas cosas que estaban pendientes. Aún así, es una operación transversal y cuanto más personal, más dedicación y más gestión haya, más se reducirán en tiempo los plazos de pago.
P.- Pero hay vacantes pendientes de cubrir.
R.- Estamos elaborando un informe para cubrir esas vacantes y adecuarlo todo en un corto plazo. Lo que no podemos es resolver en 15 días todo lo que no se ha hecho en años anteriores. Por eso éste tema ha sido prioritario. Hace falta una gestión eficiente de todos los recursos que tiene el Ayuntamiento.
P.- ¿Qué espera del PSOE en la oposición?
R.- Creo que el Partido Socialista ahora tiene que intentar -es una opinión personal- cerrar esa herida. Las elecciones se ganan o se pierden. Y cuando se pierde, hay que aprender a cerrar la herida para que todo se desarrolle en un buen término porque será bueno para la ciudad de Burgos. Hay que dejar a un lado el lenguaje político para que avance la gestión del Ayuntamiento e imagino que no encontraremos ningún tipo de problema, por lo menos en las áreas que a mí me conciernen. De hecho, espero y deseo que la colaboración sea lo más saludable posible.
«Hace falta una gestión eficiente de todos los recursos del Ayuntamiento»
P.- ¿Percibe una oposición constructiva o todo lo contrario?
R.- Hemos llegado en un contexto de elecciones generales. Entiendo que cada uno pondrá un lenguaje político a las diferentes actuaciones, así que veremos cómo se desarrolla todo.
P.- ¿Cómo es la sintonía con sus socios en el bipartito?
R.- A nivel personal, no tengo ningún problema con ellos. En términos generales, quitando el lenguaje político, creo que nos vamos a llevar bien.
P.- ¿Y a nivel político?
R.- Cada uno aportará su impronta, su programa, lo que quiera transmitir.
P.- ¿Alguna cosa buena del anterior equipo de Gobierno?
R.- No puedo decir cosas buenas ni malas como normas generales. Entiendo que habrán encontrado dificultades varias. Lo que sí hemos puesto siempre de manifiesto es que no hubiese una ejecución y una gestión más eficiente de lo que es el Ayuntamiento. No se puede, en el último año deprisa y corriendo, acelerar todos los proyectos. No se puede. Se pueden caer todos, como ha pasado con el Mercado Norte, con Burgos Río, con Promueve por su ineficacia, con el aeropuerto que se tenía que haber gestionado de otra forma... Hemos perdido cuatro años de gestión de alguna infraestructura relevante.
P.- ¿Cómo se definiría Ángel Manzanedo en una sola palabra?
R.- Con talante. Me gusta hablar muchísimo y me gusta liderar. Con todos los equipos con los que he trabajado, siempre he tenido en cuenta las opiniones diversas para después plantear una propuesta común. No es una jefatura, es un liderazgo. Y ese liderazgo implica motivar al personal, escuchar y conjuntar las opiniones.