Las ayudas de urgente necesidad regresan a cifras prepandemia en Burgos
El presupuesto para este 2023 es de 650.000 euros. Hasta el momento se han concedido 629 por 470.000 euros. Más de la mitad de las ayudas se destinan a cubrir necesidades básicas de alimentación
Tras los momentos más complicados de la pandemia derivada de la covid-19 poco a poco las familias con dificultades para hacer frente a los pagos cotidianos como la alimentación, el alquiler o los gastos corrientes se han ido reduciendo. O al menos la cuantía destinada por el Ayuntamiento a tal efecto. Así lo ponen de manifiesto los datos sobre ayudas de urgente necesidad ofrecidos por el área de Servicios Sociales.
El pasado año la Administración local destinaba un presupuesto de 800.000 euros para este tipo de ayudas, una cuantía que en 2023 se ha reducido hasta los 649.142 euros. Lejos queda ya el año 2020, cuando el Ayuntamiento burgalés destinó 1,5 millones de euros a este tipo de ayudas para dar respuesta a las necesidades de familias vulnerables que lo fueron aún más a raíz de la pandemia derivada de la covid.
En ese 2020 se gastaron finalmente 1,05 millones de euros. Ya en 2021 la cuantía se reduciría respecto al 2020 hasta los 800.000 euros, cifra que se mantendría en 2022. Para este 2023, con los 649.000 euros se vuelve a cifras que venían destinándose antes de la pandemia.
Así, hasta el 31 de julio, la gerencia de Servicios Sociales ya ha destinado 470.073 euros en 629 ayudas de urgente necesidad de las 730 solicitadas. Por tipo de gasto, la mayoría de las ayudas se han vuelto a destinar al pago de necesidades básicas de alimentación, en total 348 ayudas por valor de 250.920 euros.
En este apartado, las ayudas se diferencian entre alimentación básica y alimentación infantil. Así, de las 348, cinco fueron para alimentar a niños y el presupuesto destinado fueron 1.930 euros. Esta cifras ponen de manifiesto que más de la mitad de las ayudas se destinan a llenar los frigoríficos de los hogares.
Otra gran parte del presupuesto destinado a estas ayudas se dedica al pago del alquiler o de necesidades derivadas de la vivienda. En lo que va de año un 40% del presupuesto gastado. Hasta el momento se han solicitado 270 ayudas y se han concedido 231 por un valor de 182.282 euros. El grueso de estas ayudas se destinan al pago del alquiler. En total 136 por una valor de 132. 791 euros. También se han solicitado 10 ayudas extraordinarias para el pago de la hipotecas de las que se han concedido 9 por un valor de 7.864 euros.
En el apartado de vivienda, las familias burgalesas también han solicitado ayuda para afrontar el pago puntual de los gastos de luz y gas. En total, desde el 1 de enero y hasta el 31 de julio se han pedido 85 ayudas y se han concedido 71, por un valor de 32.911 euros. Además se solicitaron 8 ayudas para la adquisición de enseres básicos, de las que finalmente se concedieron 6 por valor de 4.276 euros. Completan el apartado de vivienda, las ayudas solicitadas para realizar reparaciones básicas de vivienda. Se han concedido 9 por 4.439 euros.
Otras necesidades
En el área de salud, se han solicitado 13 ayudas: 11 de ellas se han destinado a salud bucal y visual y las 2 restantes a servicios de rehabilitación. Todas han sido concedidas por un valor de 5.514 euros.
Por último en el área destinado a alojamientos alternativos, la gerencia de Servicios Sociales ha concedido 27 ayudas de este tipo. De ellas, 23 fueron para pagar el gasto en hostales o pensiones y 4 para hacer frente a gastos puntuales de residencias de mayores y supusieron un desembolso de 22.267 euros. Cierra la lista, diez ayudas destinadas a otras necesidades que no se especifican por valor de 9.000 euros.
Por norma general, las familias que siguen necesitando esta ayuda una vez pasaron los meses más crudos de la pandemia son e hogares con dificultades añadidas como enfermedades crónicas o discapacidad, problemas para insertarse en el mercado laboral, personas que cobran rentas mínimas o ayudas como la Renta Garantizada o el Ingreso Mínimo Vital o mayores con una pensión muy baja, entre algunos casos.
El pasado año, la Gerencia de Servicios Sociales modificaba su normativa para las ayudas de urgencia social con el objetivo de ampliar el baremo de renta y poder garantizar que ninguna familia que lo necesitara se queda fuera de estas ayudas puntuales. De esta forma se solicitó a la Junta, que aporta parte de la financiación, una modificación de los criterios de acceso a las ayudas. La principal novedad de esta modificación es que los límites económicos de acceso a la prestación que pasan a 1,35 veces del IPREM en 14 pagas y en el límite del importe máximo a conceder que será de 0,5 veces el IPREM en 14 pagas.