OLA DE CALOR
Estiman 20 fallecidos atribuibles al exceso de calor en julio y agosto
Burgos afronta la cuarta ola de calor del país este verano mirando a los 39 grados del termómetro a mitad de semana. El índice MoMo calcula 80 decesos por calor desde junio de 2022 en la provincia.
Arranca la cuarta ola de calor del verano en la península que eleva en Burgos las temperaturas máximas por encima de los 35 grados de media. Los termómetros de algunas plazas de la ciudad ya rozaban los 40 grados hacia la una del medio día del día de ayer. Los efectos del calor excesivo se dejan sentir en la salud y está detrás de 20 muertes en los meses de julio y agosto.
El Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo) de la Unidad de Vigilancia de la Mortalidad Diaria del Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III registra un total de 486 fallecimientos entre julio y agosto. De ellos 20 son atribuibles al calor. Se reparten al 50% entre ambos meses aunque en agosto la contabilidad alcanza hasta el 17 de agosto.
El estudio determina que, desde el mes de junio del año pasado hasta el pasado jueves 80 fallecimientos pueden ser atribuibles a la temperatura donde hay un riesgo de edad porque la mayor parte de los decesos se plantean en personas mayores de 65 años.
En el mes de julio se registraron, según el Índice Momo, 315 fallecimientos. El 3,2% son atribuibles al exceso de temperatura. En las casi tres semanas de agosto se han registrado 171 fallecimientos en la provincia. El 5,8% de esos decesos son atribuibles, según este registro, al calor. En el mes de agosto se han llegado a alcanzar en los últimos días los 42 grados en algunos termómetros de la capital.
Con las temperaturas más altas que las registradas el año pasado, no se alcanzan los mismos datos de fallecimientos atribuibles al calor. El año pasado fue mucho más agresivo en este sentido ya que se registraron antes. Los primeros casos se dieron en junio, algo que este año no se ha producido, con 16 muertes atribuibles al calor.
En julio se superaron con creces los registros de este mes al alcanzar los 30 muertos como consecuencia de las altas temperaturas muy por encima de los 10 alcanzados este año. Pero agosto amenaza con superar los registros de 2022. El año pasado se alcanzó un cálculo de 13 decesos por el calor una cifra que ya se roza en los 17 primeros días del mes de este año y con la perspectiva de una fuerte ola de calor para los próximos días.
En alerta por calor
La próxima semana Burgos afronta la ola de calor con los termómetros al máximo. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) mantiene el nivel de alerta por temperaturas máximas en la provincia durante los próximos días. La predicción del tiempo para la próxima semana arrancaba con un domingo con 37 de máxima y se incrementa un grado más hasta los 38 para el lunes y el martes. Para el miércoles y jueves se prevé lo peor de esta cuarta ola de calor en cuanto al indicador de los termómetros. Se esperan 21 y 22 grados de mínimas respectivamente y alcanzarán los 39 de media máxima ambos días. Ya el sábado bajarán a 16 de mínimas y 34 de máximas.
No son temperaturas nuevas. Los 39,3 de media se superaron el pasado 18 de julio y en algunos termómetros de la capital se registraron los 42 grados a principios de agosto. En julio se han superado los 37 grados durante cinco días y en otros tantos se pasó de 35.
Ante esta situación de altas temperaturas prolongadas la Agencia de Protección Civil y Emergencias recomienda evitar actividades al aire libre en las horas centrales del día, entre las doce de la mañana y las seis de la tarde, así como prestar atención a la población de riesgo, que incluye personas mayores, pacientes con enfermedades crónicas (como pueden ser hipertensión, diabetes, cardiopatías…) y menores de cinco años. Recuerdan la importancia de beber de manera regular, incluso aunque no se tenga sed, y abstenerse si es posible de la ingesta de comidas copiosas y calientes.
Avisan que una exposición prolongada al sol puede traer consigo la aparición de un golpe de calor, cuyos síntomas suelen ser dolor de cabeza y mareos, náuseas y vómitos, temperatura corporal elevada, incluso por encima de 40º C, con ausencia de sudoración, calentamiento de la piel, desorientación…
Para ayudar a una persona que sufre un golpe de calor, se recomienda colocarla a la sombra, refrescar con agua fría o hielo, en especial en la cara y las axilas, despojarle de ropa para airearla, y en el caso de que se encuentre consciente, animarle a que beba agua.
Además, se hace un llamamiento a la población para que, en el periodo de vigencia de esta alerta, se extreme la precaución en el uso del fuego al aire libre para evitar que se declare un incendio. Y es que con la subida de temperaturas también se ha decretado la alerta por alto riesgo de incendios.