Una mañana conociendo al lobo gris de los Cárpatos
Niños y niñas de entre 3 y 10 años que participan en el Programa de Infancia de Verano en el cívico de Las Huelgas pasaron la mañana con cuatro lobos grises de los Cárpatos. Pudieron conocer su forma de vida, sus características y darles de comer
Niños del cívico y miembros de la Residencia Canina Ramos con los lobos.
Enmarcada en el Programa de Infancia de Verano de los centros cívicos, los peques de entre 3 y 10 años que acuden al centro cívico de Las Huelgas a pasar parte de su vacaciones han podido disfrutar de una actividad única. Los niños han tenido un encuentro con cuatro lobos grises de los Cárpatos.
Los animales, criados en cautividad desde su nacimiento, han despertado la curiosidad- y a veces el miedo- de los niños. «Los responsables de la Residencia Canina Ramos han sido los encargados de hablar a los pequeños del animal y después han podido darles de comer», apunta Cristina Escudero, coordinadora del centro cívico de Las Huelgas.
Niños y niñas pudieron conocer todos los detalles de este animal que «se parece mucho al lobo ibérico y con el que guarda muchas similitudes», añadía la Escudero. Así, «los peques aprendieron sobre las características de este tipo de lobo, sus partes del cuerpo y algunas curiosidades, así como sobre la jerarquía».
Tras la parte teórica llegó el momento más esperado por los niños: dar de comer a los lobos. «Pudimos darles algo de pienso con la mano», comenta la animadora, quien explica que «aunque temíamos que muchos no se atrevieran a hacerlo, la mayoría lo hicieron y les encantó».
Antes de la llegada de los lobos, las animadoras del centro «hemos trabajado con lo peques la figura del lobo desde la literatura». Y es que si hay un malo oficial en los cuentos tradicionales ese es el lobo. Un pensamiento que «hemos arrastrado generación tras generación pero que hemos tratado de desterrar de este grupo de peques».
Escudero apunta que «les hemos hecho ver que el lobo es una animal salvaje que necesita comer y para eso cazar» y que «si nos encontramos con él por el momento lo más fácil es que huya de nosotros porque no come personas».
Los niños pudieron dar de comer a los lobos.
La actividad, que se ha extendido durante una hora y media, se ha celebrado en los jardines del centro cívico. «Los niños han disfrutado muchísimo de esta actividad y estaban muy sorprendidos de estar con un animal así porque no siempre se tiene la oportunidad», asegura Escudero, quien comenta entre risas que «los padres llegaron por la mañana al cívico asegurando que los niños estaban muy emocionados y que muchos no habían podido dormir esperando el momento».
A lo largo de once semanas y bajo el lema ‘Mi barrio, tu barrio, nuestra ciudad’, los niños burgaleses han podido desarrollar en los centros cívicos decenas de actividades medioambientales, artísticas o deportivas de las que han sido «los protagonistas».
El programa finalizará el próximo 6 de septiembre con motivo del inicio del nuevo curso escolar el jueves 7 de septiembre y se ha llevado a cabo en los centros cívicos de Río Vena, Vista Alegre, Capiscol, San Agustín, Huelgas, Gamonal Norte y San Juan y el Centro de Acción Social de San Pedro de la Fuente.