El espíritu del Cid vuelve a tomar Burgos

La capital burgalesa ha vuelto a engalanarse con banderas y pendones para celebrar un fin de semana dedicado al Cid. Burgaleses y visitantes disfrutan de una jornada de sábado cargada de actividades para todos los gustos y edades y enmarcada en diversos escenarios de estética medieval. El sol y una temperatura más propia de los meses de verano han sido la mejor compañía para una jornada en la que se pudo conocer más de la figura del Cid.

Desde primera hora de la mañana, las calles de la capital se llenaron de animación, música y personajes caracterizados para la ocasión. Como cada año, el mercado medieval volvía a convertirse en uno de los puntos más visitados de la cita. Productos artesanales, de alimentación, joyería, flores o bisutería son solo una muestra de lo que ofrecen los comerciantes llegados desde diversos puntos del territorio nacional. «Siempre pasamos por el mercado y todos los años cae alguna cosilla», señala Raquel mientras guarda unos par de cuñas de queso recién adquiridas.

Al tiempo un pasacalles anima la zona y los más pequeños disfrutan de un tiovivo de madera junto al río. Precisamente en el Arlanzón y desde primera hora de la mañana se celebró una actividad novedosa, el I Torneo de Lucha Medieval. Fueron muchos los burgaleses que quisieron acercarse hasta la zona para presenciar diferentes combates entre luchadores, que demostraron sus habilidades en el manejo de la espada y del escudo. «Es una propuesta muy original y sobre todo muy medieval», comenta sentado en una de las sillas dispuestas para la cita Ricardo, que viene desde Toledo para visitar la ciudad.

El tradicional campamento del Cid y los paseos en ponis también fueron un reclamo para los más pequeños que, a orillas del Arlanzón, paseaban de la mano de sus padres y abuelos observando como caballos y caballeros descansaban mientras esperaban la llegada de las justas.

Al tiempo que espadas y lanzas alzaban al aire, en el Palacio de Capitanía arrancaba la lectura del Cantar del Mío Cid. Una lectura que estuvo coordinada por la Hermandad de Caballeros Hijosdalgo de río Ubierna e Infanzones del Vivar del Cid.

A los pies del Monasterio de San Juan, de donde partiría posteriormente el desfiles cidiano, los amantes de la cetrería pudieron disfrutar de una exhibición de vuelo de aves rapaces. Una actividad en la que los presentes pudieron conocer sus hábitos, habilidades de caza y también la relación con nosotros y su importancia para el medio ambiente. Mientras tanto en el interior del espacio, niños y mayores disfrutaron de diversos talleres de carácter medieval como malabares, música, tallado en piedra, etc.

El momento más esperado llegaba con la partida del desfile. Las huestes del Cid a pie y a caballo recorrieron parte del casco histórico de la ciudad acompañados de músicos y de la corte del reino. Con su llegada al Paseo del Espolón fueron recibidos por burgaleses y visitantes hasta su llegada al Arco de Santa María.

El pregón

Allí y tras unos bailes medievales, llegaba el momento del pregón. El discurso corrió a cargo del Club de Baloncesto Grupo Ureta Tizona. El jugador grancanario Ayoze Alonso fue el encargado de dirigirse al público. «Es un auténtico honor dirigirme a vosotros encaramados al balcón de la puerta más bella de la ciudad», arrancaba el jugador desde el Arco de Santa María, al tiempo que hacía de su equipo las cualidades y virtudes de un guerrero como el Cid. «Esfuerzo, entrega y lucha contra las adversidades nos unen», aseguraba al tiempo que agradecía «el apoyo de los burgaleses» porque «es lo que nos ha hecho llegar donde estamos a pesar de las dificultades».

Tal y como Rodrigo Díaz de Vivar «tuvo un complicado peregrinaje hasta Valencia, nuestro equipo ha pasado por un camino similiar» y «ojalá algún día podamos estar en la competición que nos corresponde», señaló. Un «ninguneo» del que «también es protagonista la ciudad» en cuestiones como «el Parque Tecnológico o el Tren Directo». El grancanario finalizó sus palabras poniendo en valor las bondades de Burgos, «una tierra que es origen de los primeros europeos. del castellano y Camino de Santiago y que cuenta con la catedral más bellas, entre otras cosas».

La cita se cerró con la interpretación del Himno a Burgos y las actividades continuaron por la tarde con talleres, pasacalles y citas teatrales. La jornada se cierra con el desfile nocturno y el acto de entrega Campeador de Honor a la Fundación Menéndez Pidal por su imprescindible labor de promoción sobre la figura del Cid y el espectáculo de videomapping 'La leyenda del que en buena hora nació' en la Plaza del Mío Cid.