70 personas, 20 asociaciones agrupan la gastronomía y los colores del mundo en el Fórum

La cultura, la música, la ropa y diferentes acentos y lenguas se concentraron en durante todo el sábado en la cuarta planta del Fórum Evolución. El 7º Festival Intercultural ‘Mundo de Colores’ congregó a más de una quincena de asociaciones que trabajan con la población inmigrante que llega a Burgos, pero también agrupaciones de países como Venezuela, Colombia, México, Bulgaria o Marruecos. 

«Es una cita que arrancó hace siete años en el Hangar con 500 personas, el año pasado participaron unas 2.700 y este año esperamos unas 3.000», explicaba el organizador del encuentro y presidente de la Comisión Intercultural del Ayuntamiento de Burgos y la Asociación de Trabajadores e Inmigrantes Marroquíes (ATIM), Mohamed El Gheryb.

Un proyecto en el que empiezan a trabajar en la comisión intercultural de Burgos y representantes de una veintena de asociaciones desde el mes de abril o mayo para que todo sea alegría, buen humor y música en una jornada de convivencia a la que nunca ha faltado Nina Vardenova, de la Asociación Riala. 

En su mesa los tikvenik, un hojaldre con nueces y pasas, y un banitsa, hojaldre con queso y huevo, presiden una mesa con dulces y otros productos típicos de Bulgaria. Equipada con el Nosia, el traje típico de Bulgaria, reconoce que no ha faltado a ni una cita. «Esto va creciendo, la gente es más amable ahora que al principio que era todo un poco más frío».

Ha aprovechado un momento para comprar a Nuria (Panadería Nuri) uno de los productos típicos castellanos. Los caramelos violeta que desde 1850 repartían las violeteras en Madrid. Nuria coloca rosquillas castellanas y todo tipo de pasteles y bollos tradicionales. «Yo vengo desde el principio y me gusta venir hay un ambiente muy bonito y aporto el color de todo lo de aquí». Arepas,, tequeños, la arepa de pabellón, tarta tres leches o tarta de piña, son los aromas que desprende uno de los puestos de venezolanos en Burgos.

«Mundo de colores es una frase que refleja perfectamente que Burgos es una ciudad de acogida donde el respeto y la diversidad da la convivencia y la integración son los pilares básicos de la ciudad», explicó la alcaldesa Cristina Ayala en la inauguración de este encuentro. La cita contó con la participación del chef Antonio Arrabal (La Jamada) y la directora de Onírica, Elsa Gutiérrez. «Cuando hemos entrado nos ha llamado la atención, qué bien huele... olemos otras culturas, otros sabores que nosotros hemos asumido en la hostelería colaborando con gente que viene de fuera para aprender de ellos», señaló Arrabal. «Os animamos a probar la gastronomía de todas las partes del mundo porque, al final, la gastronomía es cultura», señaló Gutiérrez.

La Comisión Intercultural aprovechó para entregar un premio a Ramón Santamaría (Eurocasa) que hace 20 años empezó a contratar personas inmigrantes que supone ya el 60% de su plantilla. «En mi experiencia de nueve años en África me quedó grabado un dicho: lo que en la vida das, recoges. Así que muchísimas gracias».

En la inauguración partiparon, entre otros, representantes de las organizaciones de la Comisión Intercultural, la concejal de Servicios Sociales, Andrea Ballesteros y la concejal del PSOE, Sonia Rodríguez. Tras las palabras la música para empezar a amenizar un acto que se prologó durante todo el día. ‘Manos de colores’ de Happening sonaba al ritmo de todos de manera previa a la música y la danza de la Escuela Ritmo y la Escuela de Patinaje Artístico de Burgos que iniciaron el aspecto más lúdico del festival.