El Correo de Burgos

El convenio de hostelería de Burgos se bloquea cuando estaba muy cerca el acuerdo

La patronal pide ser «cautos» tras seis reuniones y con una subida del 4% este año y del 3% en 2024 que estaba casi cerrada

Los hosteleros ajustan horarios y  días de apertura en función de la disponibilidad de personal al no poder cubrir toda la demanda.

Imagen de una terraza de un establecimiento de hostelería.OSCAR CORCUERA

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Burgos

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La negociación del nuevo convenio del sector de la hostelería va camino de un conflicto colectivo después de que tras la sexta reunión entre la patronal y los representantes de los trabajadores lo que estaba cerca de ser un acuerdo entre las partes acabó con los representantes de los trabajadores levantándose de la mesa.

La razón, según las fuentes sindicales de la negociación consultadas con este periódico, es que la patronal quería revisar las subidas salariales que estaban casi pactadas, que contemplaban un incremento del 4% para el año 2023 y del 3% para el año 2024. De nuevo se puso sobre la mesa el anuncio por el Gobierno sobre la intención de reducir la jornada laboral a 37 horas y media a la semana, lo que, según la patronal, «pierden un 6% de salario».

La reducción a 37 horas y media no es nueva en la negociación del convenio de hostelería, ya había estado presente en las reuniones anteriores, por ello, recuerdan desde los sindicatos, se había planteado el nuevo convenio con un periodo de vigencia de dos años, en vez de los cuatro años habituales ante la incertidumbre sobre la aplicación de esta jornada laboral. Sin embargo, en la última reunión, los representantes de la patronal volvieron a poner sobre la mesa un periodo de vigencia del convenio de cuatro años, así como con las incapacidades temporales. La Federación de Hostelería, a través de un escueto comunicado, se señalaba que es necesario «necesidad de revisar al alza los salarios de los trabajadores del sector, pero los costes que están suponiendo para las empresas la aplicación de las medidas legislativas que el Gobierno ha ido aprobando, y las que ha anunciado que tiene el propósito de aprobar a partir de ahora, obligan a ser extremadamente cautos sobre este tema».

Por su parte, desde los sindicatos se apunta que a partir de ahora se abre un escenario en el que no se descartan las movilizaciones y la huelga, aunque no se ha decidido aún.

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