20 personas aspiran a convertirse en voluntarios de Protección Civil

El servicio de Seguridad Ciudadana y Emergencias ha recibido 20 solicitudes de personas interesadas en convertirse en voluntario de Protección Civil municipal. Este es el resultado de la campaña lanzada el pasado otoño, durante el mes de octubre. 

El proceso tiene que culminar con la formación imprescindible para que esta veintena de candidatos se sume a la Agrupación Local de Protección Civil.

El concejal del área, Ignacio Peña (Vox), explica que está previsto que el curso, que lo tiene que programar la Junta de Castilla y León, pueda realizarse entre los meses de febrero y marzo. Una vez superado, con contenidos sanitarios de primeros auxilios y también de seguridad ciudadana, los aspirantes se convertirían en voluntarios.

Desde Seguridad Ciudadana se apostó por captar a nuevas personas después de lo sucedido entre abril y mayo de 2023, en los últimos coletazos del pasado mandato en el Ayuntamiento de Burgos. Un grupo importante de voluntarios se dio de baja para reclamar mejoras en la sede de Protección Civil o una nueva. Ya en verano 20 de los 38 que formaban la agrupación regresaron al servicio y son los que han estado en activo durante estos meses.

Reforma de la sede

En cuanto a la reforma de la sede, ubicada en la calle Juan Bravo, que fue la opción por la que se decantó el equipo de Gobierno de Cristina Ayala, también se han dado varios pasos para avanzar.

De hecho, se adjudicó al estudio de arquitectura Barrio y Cameno la redacción del proyecto de mejora de este espacio, que permitirá recuperar para el uso de los voluntarios varias estancias del edificio municipal que estaban en infrautilizadas.

La reforma integral de la sede de Protección Civil podría rondar el millón de euros, según las primeras estimaciones que se realizaban el pasado octubre.

Las áreas de Urbanismo y de Seguridad Ciudadana están implicadas en este proyecto para mejorar el inmueble que fue sede del laboratorio municipal. 

Del encargo del proyecto, por valor de 7.804 euros, se ocupó Urbanismo y el plazo de ejecución era de dos meses. Sin embargo, se ha decidido recientemente ampliar en otro mes el tiempo para que los arquitectos presenten el trabajo en el Ayuntamiento de Burgos, ya que coincide con la época de fiestas navideñas y con varios imprevistos que se han detectado en la sede y que deben ser tenidos en cuenta para incorporarlos al proyecto.

La actuación que se plantea es destinar la planta baja en su conjunto como garaje para los vehículos con los que cuenta la Agrupación y dejar la segunda para los voluntarios. En la actualidad, según explica el edil, la planta baja solo estaba ocupada en parte por los vehículos, mientras que hay otra zona que usa ocasionalmente el servicio de Medio Ambiente.

Mientras, la planta superior, tiene una parte en desuso, la que ocupaba antiguamente el laboratorio municipal, y otra que utilizan los voluntarios. La idea sería acomodar todo el espacio y para ello se ha consultado cuáles son las necesidades de Protección Civil para que se ajuste a su trabajo.