Urbanismo planea mejoras en la plaza Vega para facilitar el tránsito peatonal
El objetivo es retranquear el vallado y eliminar los contenedores soterrados de la zona para recuperar unos pocos metros para el paso de los viandantes
La situación de abandono de la esquina de Plaza Vega, enquistada en un culebrón inmobiliario desde hace una década, ha sido una preocupación de varios equipos de Gobierno en el Ayuntamiento de Burgos, que no han conseguido desatascar el problema. También para el bipartito de Cristina Ayala, que ha empezado a tomar cartas en el asunto, a través de varias actuaciones sencillas que persiguen mejorar el tránsito de los peatones, sin apenas espacio para pasar por el vallado de una obra que se paró en el año 2013.
El concejal de Urbanismo, Juan Manuel Manso, reconoce la complejidad de la situación porque hay una parte del solar en manos de un administrador concursal tras la quiebra y posterior liquidación de la constructora Aragón Izquierdo. La otra, que pertenece a varios propietarios, está inmersa en un procedimiento judicial que se alarga también por varios años.
Y opina que se pueden tomar cartas en el asunto para solucionar la estrechez de la acera como consecuencia de que el vallado de obra ocupa vía pública en una zona céntrica de la ciudad que va de la calle Madrid, hacia la zona noble del puente de Santa María, el arco y la Catedral de Burgos.
Así, se ha comprobado que se permitió para construir los muros pantalla de la obra inacabada, se permitió ocupar parte del espacio público, una licencia que estaría «caducada en todos los aspectos».
Por tanto, la idea de Urbanismo es retranquear ese vallado para recuperar unos pocos metros de espacio junto a la salida de vehículos del aparcamiento de plaza Vega, que es la zona más estrecha. Para lograr ese objetivo, desde el Ayuntamiento se pondrán en contacto con el administrador concursal del solar, pero saben que habrá problemas porque esta actuación requerirá algún desembolso económico. Por este motivo, no se descarta la vía de la ejecución subsidiaria, es decir, que corra el Ayuntamiento con los gastos, y que después pase la factura a los responsables.
Por otro lado, el bipartito tiene en vías de adjudicación el contrato para renovar y eliminar varios contenedores soterrados en el centro histórico. Y unos de los que está previsto quitar son los de plaza Vega, cuyos buzones, inutilizados desde hace años, están en mitad del poco espacio de paso que queda para los viandantes.
Manso señala que está próxima la designación de la empresa que se hará cargo de este contrato, que se ha desarrollado desde el área de Urbanismo, y considera que una de las prioridades es eliminar esos depósitos subterráneos de basura de la esquina de plaza Vega.
Estas serían dos pequeñas intervenciones que mejorarán el tránsito, aunque la madre del problema, que es la existencia de un solar abandonado en pleno centro, seguirá estando ahí.
La resolución judicial del proceso en el que andan inmersos los propietarios de la parte que da a la calle Valladolid podría arrojar algo de luz y desbloquear esa zona para que se desarrolle urbanísticamente.