Una bufanda gigante para reflejar la fuerza vecinal de San Cristóbal: «Somos mejores si vamos juntos»
La prenda, de 75 metros de largo, se ubicará este domingo entre los postes que adornan la entrada del centro municipal del barrio
La bufanda de San Cristóbal, de 75 metros, se ubicará en el centro municipal del barrio.
«Todos somos unión y formamos parte de esta bufanda», sentencia Conchi Pérez, con más razón que un Santo, en la víspera de un acto tan emotivo como inusual en el barrio de San Cristóbal. La bufanda a la que hace mención no es metafórica. 75 metros con lanas de distintos colores dan fe de los resultados que arroja el esfuerzo colectivo. La prenda en cuestión, indispensable durante el frío invierno de Burgos, se ubicará a partir de este domingo en un «sitio emblemático»: el centro municipal situado en la calle Alcalde Martín Cobos.
Bien visible, rodeando los postes que adornan la entrada, esta bufanda multicolor se instalará a las 13:30 horas para hacer gala de la «confraternización» que ha imperado desde que el pasado 12 de enero medio centenar de vecinos se pusiesen manos a la obra. «Queremos que todo el mundo se pregunte cómo ha llegado hasta aquí», afirma Conchi, entusiasmada, tras asegurar que «nos ha sorprendido mucho la participación».
Una abuela del barrio se emocionó al revivir la peculiar técnica que empleaba su madre a la hora de tejer.
Fue durante una reunión en la parroquia de San Juan de Ortega, enmarcada en la campaña Vecineando, cuando Conchi planteó lo de la bufanda. Había visto una iniciativa similar en la tele, cuando la pandemia, y le pareció que podría ser interesante. Trabajo en equipo, visibilidad del barrio y un ejemplo inmejorable de la diversidad que anida en San Cristóbal. Dicho y hecho, el boca a boca saltó de aquel encuentro y de la eucaristía a las calles, donde también se pusieron varios carteles a modo de llamamiento.
El primer taller, más centrado en «charlar y crear una atmósfera de buen rollo», sirvió para sentar las bases del proyecto. Había material con el que trabajar porque muchos vecinos llevaron lana a la parroquia. De repente, un grupo de chicas jóvenes se presentó para colaborar. A una le daba apuro porque no sabía tejer y dijo que iba como espectadora. Sin embargo, tenía unas cuantas maestras a su alcance y no tardó demasiado en comprobar que el reto era cuestión de coser -nunca mejor dicho- y cantar.
Vecinas y vecinos de San Cristóbal tejiendo la bufanda gigante.
Hubo momentos entrañables, tanto en la primera como en la segunda sesión. Conchi recuerda con especial cariño cuando una abuela del barrio se emocionó al revivir la peculiar técnica que empleaba su madre a la hora de tejer. Lo mejor de todo, en cualquier caso, fue comprobar que esta gigante bufanda de San Cristóbal ha sido capaz de unir a distintas generaciones. Cierto es que la juventud se ha implicado menos que los mayores, pero ahí estaba. El hijo de Conchi, por ejemplo, aportó su granito de arena desde casa. Que conste, eso sí, que había muchas más mujeres que hombres. Así pues, que tomen nota para próximas ocasiones.
Con la bufanda ya lista después de ensamblar todas las piezas el viernes, San Cristóbal volverá a demostrar que «somos mejores si vamos juntos». La frase en cuestión, que el barrio respalda con hechos, se recoge en el comunicado que se leerá públicamente con motivo de la instalación. En este sentido, Conchi se enorgullece del «clima de vecindad» del que forma parte y que confronta con un contexto social en el que, desgraciadamente, «cada vez somos más individualistas».
En Navidad, la parroquia rifó una Cesta Solidaria que permitió recaudar 1.850 euros para Cáritas.
Aparte esta iniciativa, más simbólica que otra cosa, cabe destacar la Cesta Solidaria que se rifó en Navidad, con productos donados de forma altruista por establecimientos del barrio, y que permitió recaudar 1.850 euros. El dinero obtenido, según precisa, será gestionado por Cáritas para su reparto entre familias que se encuentran en situación de pobreza energética.
¿Qué será lo próximo en la parroquia de San Juan de Ortega? Habrá que esperar a los Carnavales para ver en directo a la chirigota del barrio. Habituada a actuar en el salón de actos de la iglesia, será la primera vez que salga a la calle. Mientras tanto, Conchi aprovecha la ocasión para poner de manifiesto alguna que otra reivindicación en favor de San Cristóbal. A bote pronto, plantea la necesidad de habilitar más líneas de autobús para que San Cristóbal «sea más accesible al centro». Y tampoco se olvida de los mayores, a quienes se debe «atender sus necesidades», y de los jóvenes, que demandan «alternativas de ocio y tiempo libre de más calidad».