«Hemos conseguido que los sindicatos dejen de reprocharse cosas. Estamos todos en el mismo barco»
Agricultores independientes y Opas se unen para canalizar las reivindicaciones del sector y negociar futuras movilizaciones con la Subdelegación / Esperan que «el ejemplo de Burgos cunda en el resto de España»
Hablando se entiende la gente. No es una frase hecha, sino una realidad que el campo burgalés ha decidido poner en práctica con el objetivo de que sus reivindicaciones «lleguen a buen puerto». El desencuentro latente entre los agricultores independientes que a lo largo de esta semana han participado activamente en diferentes movilizaciones y cortes de tráfico y las organizaciones profesionales agrarias (Opas) ha dado paso este viernes a un nuevo escenario: un frente común basado en la «unidad de acción» para seguir adelante.
Parecía complicado que ambas partes alcanzasen un acuerdo. Sobre todo a primera hora de la mañana, cuando más de un centenar de personas se congregaban frente a la Cámara Agraria de Burgos con motivo de la reunión prevista entre la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL), Asaja, UPA y COAG para plantear una manifestación conjunta la próxima semana. Sin embargo, la cita se trasladó a Mazuelo de Muñó, cuya alcaldesa es la presidenta provincial de UCCL, Susana Pardo.
El malestar saltaba a la vista y una joven profesora, familiar de agricultores y muy implicada en las protestas, resumía a este periódico lo que muchos pensaban en ese momento: «no van a escuchar a los agricultores, no quieren saber su opinión». Aún así, los portavoces de este movimiento tomaron cartas en el asunto. Hablaron por teléfono con los representantes de las Opas y forzaron un encuentro en Mazuelo tras la reunión. Así fue cómo se gestó el «todos a una» que permitirá canalizar las reivindicaciones del sector a través de los sindicatos y, al mismo tiempo, abrir una vía de comunicación fluida con la Subdelegación del Gobierno para ‘legalizar’ las próximas movilizaciones.
Lo importante, tal y como indica uno de los portavoces de esta plataforma de agricultores independientes, es que «hemos conseguido que los sindicatos dejen de reprocharse cosas». A fin de cuentas, «estamos todos en el mismo barco» y «si no contaban con nosotros iba a ser muy difícil».
Consciente de que «necesitamos unirnos» todos, la presidenta de UCCL Burgos celebraba el pacto entre las Opas y la plataforma porque «es lo que quiere el campo». Además, espera que «el ejemplo de Burgos cunda en el resto de España» porque solo así será posible «conseguir que las políticas que están lastrando al sector lleguen a buen puerto». La prioridad, más allá de recabar las propuestas de todo el mundo, es lograr que la Subdelegación dé su visto bueno a la movilización que las organizaciones agrarias y los independientes pretenden llevar a cabo el próximo miércoles 14 de febrero. Un día antes, está previsto que una nutrida representación acuda a la concentración convocada en el puerto de Santander.
El acuerdo alcanzado, satisfactorio para todas las partes implicadas, fue recibido entre aplausos por la mayoría de los más de 300 manifestantes que se concentraron a partir de las 11, previo paso por la Subdelegación del Gobierno, en la A-1 a la altura del hotel Abadesa (antes Landilla) con la firme intención de cortar la carretera.
«Venimos a reivindicar, no a pelear», zanjó uno de los interlocutores de la plataforma tras informar del nuevo rumbo que deben tomar las protestas a partir de ahora. En este sentido, insistió en que «tenemos que llegar a acuerdos, no podemos hacer lo que nos dé la gana». Sin renunciar, eso sí, a «seguir peleando por nuestros intereses». Tras el altercado de la AP-1 en Rubena que se saldó con dos detenidos, el sentir general era de no enfrentarse a la Guardia Civil, que habilitó un amplio despliegue de antidisturbios reforzado con agentes de la Policía Nacional.
«No vamos a cortar porque la vamos a preparar muy gorda», llegó a decir uno de los agricultores a sabiendas de que las fuerzas de Seguridad no se lo iban a permitir bajo ningún concepto. Pese a todo, los manifestantes permanecieron apostados en el Landilla y, finalmente, la llegada de dos mandos de la Benemérita propició una negociación de más de 40 minutos que favoreció un corte puntual de la vía. Primero en el carril en dirección a Madrid y después en el contrario. Durante unos minutos, la plataforma bloqueó la circulación en ambos sentidos y la concentración se disolvió, tal y como se había establecido, sin ningún tipo de incidencia. A las 13:15 horas, la normalidad volvía a imperar en la A-1.
Cuestiones pendientes
«Me ha encantado el saber estar de la Guardia Civil y de nosotros», reconocía José Luis, presente en el corte de la autovía, tras comprobar que el diálogo sirvió de mucho para que la protesta se desarrollase de manera pacífica. En cualquier caso, se muestra partidario de mantener la lucha activa y no duda en poner el foco sobre varias de las cuestiones que el sector tiene sobre la mesa. Por un lado, la proliferación de instalaciones eólicas y solares en zonas de cultivo y, por otro, el exceso de burocracia y papeleo. Sobre este último asunto, esgrime que «para tener un cuaderno digital hay que tener cobertura».
Burgos
Libertad para los detenidos por el corte de la AP-1 tras declarar por videoconferencia
Diego Santamaría
«Si esto sigue así, habrá más movilizaciones», advertía la profesora presente en la concentración frente a la Cámara Agraria. Bien lo sabe, porque lo ve en su día a día, que «el agricultor no gana nada en comparación con lo que ganan los supermercados y todas las grandes superficies».
El coportavoz de la plataforma, por su parte, tampoco pasa por alto un par de temas sobre los que apenas se habla: la normativa que impide la circulación de tractores en el término municipal de Burgos pese a contar con «2.000 hectáreas de terreno cultivable» y la situación de los dos compañeros detenidos el jueves. En su opinión, merecen un «indulto» porque «son gente normal y corriente, no son extremistas de ningún tipo».
Belorado y Merindades
La cuarta jornada de protestas agrarias volvió a convertir Belorado en uno de los principales focos de acción. La N-120 a su paso por la localidad no solo experimentó retenciones, sino que permaneció totalmente cortada al tráfico por la mañana y por la tarde, cuando una tractorada irrumpió en la rotonda de la ITV paralizando por completo el tránsito de vehículos.
También hubo frentes activos en el norte, principalmente en Las Merindades. Las vías más afectadas por las retenciones fueron la CL-629 en distintos tramos y la BU-550 a la altura de Lastras de Teza.