La «vuelta a la normalidad» en los centros de salud reducen un 5% las urgencias en el PAC

El servicio de urgencias de Atención Primaria en el Punto de Atención Continuada (PAC) del Divino Valles ha reducido la demanda de pacientes un 5,3% en el último año. Entre enero y diciembre de 2023 se registraron 43.420 usuarios. Son 2.453 menos que en 2022. También son un 22,6% menos que en 2019, el último año libre de los efectos de la pandemia de covid. Son 12.738 usuarios menos aunque aquel año el PAC se dividía entre las cuestionadas instalaciones de Gamonal Antigua y del centro de salud de San Agustín.

La vuelta a la atención presencial y la normalización de la atención de patologías crónicas tras la pandemia reducen la demanda. «Los centros de salud han tenido una vuelta a la normalidad progresiva y eso genera que la patología crónica sea valorada por los médicos del centro de salud», señala la gerente de Atención Primaria de Burgos, Mónica Chicote. 

La diferencia respecto a la situación de 2019, con dos puntos de atención continuada y una organización completamente diferente, es porque «aquellos años teníamos muchas vacantes en los centros de salud de zona urbana y cada vez vamos consiguiendo tener más plazas ocupadas y de ahí que haya menos actividad, porque hay una mejor asistencia durante la jornada ordinaria», señala directora de enfermería de Atención Primaria, Itziar Martínez.

El equipo sanitario está compuesto por un grupo estable de 28 profesionales en plantilla a los que se refuerza con más personal «dependiendo de la presión asistencial o si existe un evento que vemos que vamos a necesitar esos refuerzos», señala Chicote. La plantilla orgánica está compuesta por 12 médicos, 12 enfermeras y seis celadores. Además mantienen una colaboración estrecha entre urgencias hospitalarias para que los estudiantes de MIR realicen las prácticas tanto en el hospital como en el PAC y llevan a cabo acciones de formación a residentes. Contar con un equipo estable «hace más sencilla la organización que antes cuando había una plantilla muy cambiante», apunta Martínez. También se ha reducido la necesidad de personal al cubrir un PAC y no dos.

«Son buenos datos porque el número de profesionales que forman parte del PAC sigue siendo el mismo y nos da cierta tranquilidad tener un margen de actuación dentro del aumento de la presión asistencial que se puede dar en ciertas épocas», señalan.

De esta manera, las épocas de menos actividad son en verano «al haber flujos poblacionales a zonas rurales y de vacaciones». El pico de intensidad de actividad se da en «las fiestas de Burgos y en la época del otoño e invierno por la afluencia debido a las epidemias emergentes de virus respiratorios», confirma.

En cuanto a los avisos que movilizan al personal pueden oscilar entre los cuatro a cinco diarios. Para las intervenciones en exterior el área de salud de Burgos es el único con ambulancia dentro del Punto de Atención Continuada. «Todos los avisos domiciliarios que hacen nuestros profesionales son en ambulancia porque mejoran los tiempos de respuesta para atender el aviso y la capacidad resolutiva en caso de derivar al Hospital al poder ir haciendo el tratamiento al paciente durante el traslado», remarca la gerente de Atención Primaria. 

De esta manera ni los profesionales tienen que utilizar su vehículo propio y tener que perder tiempo en aparcar o acudir en taxi y, en caso de necesitar ir al Hospital, llamar la ambulancia. El profesional sanitario se centra en el paciente. Un servicio «único en las 11 áreas sanitarias de la comunidad y un elemento muy valioso para los profesionales que se asume con el presupuesto del PAC», añade la directora de Enfermería. Un servicio de transporte sanitario que también se utiliza para el traslado de pacientes que se derivan al hospital.