El PP confía en Ayuso para reabrir el Tren Directo: «Puede traer muchos beneficios a Madrid»

La reapertura del Tren Directo es, sin lugar a dudas, uno de los principales caballos de batalla del Partido Popular de Burgos. Una reivindicación histórica, capaz de unir a formaciones políticas de distinto signo y numerosos colectivos, que no acaba de concretarse pese a las promesas del Gobierno de Pedro Sánchez. Ante esa tesitura, el PP trata de jugar sus cartas y no duda en recurrir a su más mediática figura: Isabel Díaz Ayuso. 

«El Tren Directo no es solo una exigencia de Burgos, de Aranda y de toda la provincia», indicaba este sábado el presidente del PP burgalés, Borja Suárez, haciendo hincapié en que la recuperación de esta línea ferroviaria «puede traer muchos beneficios a la Comunidad de Madrid». Es por ello, según ha expuesto, que la propia Ayuso «participa también de ese interés» y su Gobierno «ha dicho alto y claro que sí, que es una infraestructura que será bien recibida y el Ministerio la tiene que afrontar». 

La otra cara de la moneda, según el mandatario 'popular', sería Óscar Puente. En su opinión, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible «forma parte de un Gobierno fallido y además lo hace con alarde». Y le acusa de ir «en contra de los intereses de la tierra a la que pertenece», pues «lejos de hablar de las infraestructuras que interesan para España y para Castilla y León, está enredado en otras cosas». 

«Esto es el sanchismo», ha enfatizado Suárez aludiendo no solo a Puente, sino también a los socialistas burgaleses Esther Peña, Daniel de la Rosa y Luis Tudanca. Éste último, a su juicio, hace gala de «un seguidismo absoluto a Pedro Sánchez en contra de los intereses de todos los castellanoleones». 

Adelanto electoral

Con motivo de la Junta Directiva Provincial del PP de Burgos que ha reunido a representantes políticos de todas las comarcas en el Monasterio de San Juan, Suárez ha puesto el foco sobre la prórroga de las cuentas estatales mientras instaba al PSOE a «adelantar ya las elecciones» para «dejar en manos de los españoles la decisión de volver a formar un Gobierno en el que no se dependa de los nacionalismos. Y mucho menos de un nacionalismo tan excluyente como el catalán». 

Creen los 'populares' que, ahora sí, los números darían para apear a Sánchez de la Moncloa. No tanto en Cataluña y el País Vasco, con elecciones a la vista, aunque se aspira a «obtener los mejores resultados» trasladando el mensaje, amplificado desde Burgos, de que «el nacionalismo es excluyente, divide y tiene cautivo al Gobierno de España». 

En clave local, con las infraestructuras como principal baza para hacer oposición, el PP ya trabaja en el diseño de diferentes iniciativas parlamentarias. En este sentido, el diputado burgalés Ángel Ibáñez ha anunciado que su grupo presentará una Proposición no de Ley (PNL) en la Comisión de Transportes del Congreso, «muy similar» a la debatida en las Cortes de Castilla y León, para exigir avances en el desarrollo de proyectos pendientes como la A-11, la A-12, la A-73 o el Tren Directo. 

«Vamos a seguir en esa batalla», advertía Ibáñez convencido de que en España prima una «desigualdad» que «se traduce en el hecho de que los privilegios de unas pocas élites están convirtiéndose en el fracaso de las infraestructuras del resto de los españoles». Suárez, por su parte, ha señalado que tan solo aquellas administraciones gobernadas por el Partido Popular, con o sin Vox, son capaces de ofrecer «estabilidad».