Silencio y respeto al paso de Nuestra Señora de la Soledad

La salida de la iglesia de Santiago y Santa Águeda, solemne y espectacular, volvió a ser un hervidero. La lluvia concedió este Sábado Santo una tregua a Nuestra Señora de la Soledad. No así el Ministerio de Justicia, que el pasado 20 de marzo denegó oficialmente, por octavo año consecutivo, el indulto a un preso de la cárcel de Burgos. Otro varapalo. Para la cofradía, por supuesto, pero sobre todo para el reo en cuestión, que teóricamente cumplía los requisitos necesarios para obtener la libertad.

Más allá de la decepción, la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad y de Santiago puso a su Virgen a punto. El silencio y el respeto imperaban a su paso entre los cientos de personas que quisieron formar parte del recorrido, con salida y llegada en Santa Águeda, por las calles de Barrantes, Aparicio Ruiz, Eduardo Martínez del Campo, el paseo de la Audiencia, la plaza del Rey San Fernando y Nuño Rasura.

Sin la histórica liberación del encarcelado en el arco de Santa María, la procesión transcurrió con paso firme desde sus primeros compases. Las cornetas y tambores de la banda de la Cofradía anunciaban la llegada de la Virgen, que se hizo especialmente de rogar en la plaza de Castilla. Muchos rezagados aguardaban en la rotonda expectantes. La impaciencia de los más pequeños de la casa era evidente. Más que por el tedio que conlleva la espera, la curiosidad les podía. Y los padres, pacientes y cariñosos, resolvían sus dudas advirtiendo de antemano que Nuestra Señora de la Soledad merece una silenciosa devoción.

Aparte de otras cofradías y de las hermandades penitenciales de la ciudad, la comitiva contó con la presencia de la Hermandad del Santísimo Cristo del Milagro de Aranda de Duero. Todos los participantes, de punta en blanco, culminaron el acto más multitudinario del Sábado Santo. A continuación, muchos se desplazaron hasta la sede del Círculo Católico de Obreros, en la calle Concepción, para asistir a la procesión de la Luz de Cristo. El recorrido, amenizado por la Banda Círculo Musical Burgos y Orquesta Santa Cecilia, dio paso a la solemne misa pascual en el interior de la capilla del Círculo Católico.