La violencia sexual se dispara en Aranda y crece en Burgos y Miranda
Los delitos de naturaleza sexual, a excepción de las violaciones, y el cibercrimen son los que más han aumentado en el último año. En Aranda se multiplican un 275% los casos de violencia sexual sin penetración
Los delitos que atacan a la libertad sexual de las personas se han multiplicado el año pasado en todo el país, al igual que la ciberdelincuencia de todo tipo. La comparativa del conjunto de 2023 con respecto al año anterior desvela que en determinadas poblaciones las denuncias por delitos contra la libertad sexual se han incrementado significativamente.
En el conjunto de la provincia de Burgos, este tipo de ofensas penales aumentan, de forma global, en un 31,1 por ciento con 97 casos registrados a lo largo de 2023 frente a los 74 de los que se tuvo noticia en 2022. Cabe destacar que las agresiones sexuales con penetración descendieron en la provincia un 15,4% con 22 violaciones en 2023 frente a las 26 que se cometieron el año anterior.
Pero sí hay que lamentar un incremento notable en el territorio provincial en el resto de delitos contra la libertad sexual que contempla el Código Penal. En Burgos en su conjunto se registraron en 2023 75 caso de delitos como la agresión sexual, también la que se realiza sobre menores de 16 años, acoso sexual, exhibicionismo, provocación sexual, delitos relativos a la prostitución o corrupción de menores.
Un año antes habían sido 48 casos, lo que se traduce en un incremento del 56,3% de la criminalidad sexual.
En este apartado del balance trimestral de Criminalidad que elabora el Ministerio del Interior destaca sobremanera el enorme incremento de los casos de violencia sexual que se han producido en Aranda de Duero en 2023, donde el conjunto de delitos contra la libertad sexual aumenta un 275%.
De hecho se pasa de 4 delitos de este tipo registrados en 2022 a 15 en 2023. En todo el territorio burgalés el incremento promedio fue del 56% con 75 casos, de los que 15 correspondían a Aranda, 31 a Burgos capital y 5 a Miranda de Ebro.
Caso aparte son las agresiones sexuales con penetración violaciones que se han reducido un 50% en Aranda al pasar de 4 violaciones en 2022 a 2 en 2023.
Aranda es, junto con los municipios de Arroyo de la Encomienda (+600%) y Laguna de Duero (+133%), en Valladolid; donde más se han multiplicado los casos de violencia sexual. En cambio, en San Andrés de Rabanedo, en León y la capital vallisoletana las violaciones con penetración se han disparado un 400 y un 300%, respectivamente.
Llama la atención el hecho de que en la ciudad de Valladolid se produjesen 20 violaciones en 2023, por las 17 de Salamanca y Burgos, que son las otras poblaciones de más de 20.000 habitantes con más agresiones sexuales con penetración, con 17 casos casa una.
En Miranda de Ebro se registraron 7 delitos contra la libertad sexual de las personas, lo que supone un aumento del 40%. De ellos, dos fueron violaciones y 5 otros delitos de índole sexual sin penetración.
Burgos, con un alza del 31,1%, está por encima de la media autonómica de los delitos contra la libertad sexual que indica un crecimiento de los casos del 15,1 por ciento.
Cabe resaltar que en la Comunidad hay varias provincias en las que la violencia sexual ha disminuido, como Palencia o Soria; una en la que se ha mantenido al mismo nivel que el año anterior; y otras en las que crece de forma moderada como Ávila y Valladolid, aunque en esta última hay que destacar el gran número de violaciones registradas en 2023, con 27 casos, sólo uno más que en el conjunto de las provincias de León y Salamanca que son los dos territorios en los que más violaciones se comenten. En Burgos fueron 22 casos en toda la provincia.
Ciberdelincuencia
La criminalidad a través de dispositivos electrónicos, internet, aplicaciones de mensajería, redes sociales y cualquier otro medio tecnológico se coloca como el segundo tipo de delincuencia que mayor crecimiento experimentó a lo largo del año 2023., según los datos que proporcionan la Policía Nacional, Guardia Civil y Policía Local.
Si la criminalidad convencional decae en la provincia de Burgos un 0,9% el año pasado con respecto a 2022, según los datos publicados por el Ministerio del Interior el pasado miércoles, la violencia sexual crece un 31,1% y la cibercriminalidad lo hace en un 28,2%.
En la provincia de Burgos en su conjunto se contabilizaron en 2023 3.619 ciberdelitos, casi 800 más que el año anterior. En la gran mayoría de los casos se trató de estafas informáticas y sólo en 357 ocasiones se denunció algún otro tipo de delito cibernético. De hecho, en Burgos se comenten más estafas a través de internet (3.262 en 2023) que hurtos (2.825 casos). Le siguen los robos con fuerza en las cosas (876 casos) y en domicilios (587).
Seguridad rural
Cabe reseñar que tres de cada cuatro hurtos que se producen en la provincia tienen lugar en la ciudad de Burgos. Es más, entre la capital provincial, Aranda y Miranda copan la práctica totalidad de los hurtos en la provincia. En el resto del territorio burgalés sólo se registraron 26 hurtos en todo el año 2023, uno cada quince días de media.
No ocurre así con los robos en el interior de los domicilios ya que, aunque entre las tres poblaciones burgalesas con más de 20.000 habitantes copan el 63% de los asaltos a viviendas, el 37% restante tienen lugar en las localidades del medio rural.
En el caso del tráfico de drogas, la capital burgalesa concentra la mayoría de los actos criminales con 46 casos, por 2 en Aranda y 9 en Miranda, lo que supone que las tres localidades más pobladas de la provincia acaparan en 69,5% de este tipo de actos criminales relacionados con las drogas y el 30,5% restante son delitos que tienen lugar en los pueblos burgaleses.
En 2023 se produjeron 90 robos de vehículos en todo Burgos y provincia y seis de cada diez ocurrieron en la capital.
Pese a la gran repercusión pública que alcanzó la muerte de un joven vallisoletano por un puñetazo en el rostro que le propinó otro joven burgalés el pasado mes de febrero, los delitos graves y menos graves de lesiones y riñas tumultuarias habían descendido un 9,9 por ciento al final del año 2023 con respecto al ejercicio precedente.
Por otro lado, los homicidios y asesinatos se reducen a la mitad ya que en 2022 hubo dos muertes violentas y en 2023, sólo una. Además, los casos de homicidio doloso o asesinato en grado de tentativa también se redujeron significativamente al pasar de 12 a 4 casos, un 75% menos. No hubo que lamentar secuestros el año pasado.
CRIMINALIDAD
Violencia sexual. Los delitos contra la libertad sexual se incrementan un 31,1% en la provincia y suman 97 casos en 2023. Es el tipo de delito que más crece en 2023 en la provincia. Burgos acumula 48 casos, por los 17 de Aranda y los 7 de Miranda. De ellos, 22 son violaciones con penetración y 17 de ellas ocurren en Burgos capital. En Aranda se disparan un 275% los casos de violencia sexual sin penetración, al pasar de 4 a 15 en 2023.
Cibercriminalidad. Es el segundo delito que más crece en el útimo año en la provincia con 3.619 casos, la mayoría de ellos (3.262) son estafas informáticas. La cibercriminalidad aumenta en un 28,2% y, especialmente en Burgos capital donde crece un 20,9%.
Hurtos y robos. Tres de cada cuatro hurtos que se producen en la provincia tienen lugar en la ciudad de Burgos. Es más, entre la capital provincial, Aranda y Miranda copan la práctica totalidad de los hurtos en la provincia. En el resto del territorio burgalés sólo se registraron 26 hurtos en todo el año 2023. En el caso de los robos en domilios, un 63% se produjeron en los pueblos y el 37% en las tres grandes poblaciones burgalesas.
Tráfico de drogas. La capital burgalesa concentra el tráfico de droga con 46 casos, por 2 en Aranda y 9 en Miranda y acaparan entre las tres en 69,5%. El 30,5% restante son delitos por drogas que tienen lugar en los pueblos burgaleses.