Aumentan las denuncias por delitos de odio porque «conocemos más»
Agentes de Policía Nacional y Guardia Civil participan en una jornada con seis entidades para entender estas situaciones
Los delitos de odio y las denuncias se han incrementado en los últimos años. En Burgos han pasado de una en 2014, por una cuestión religiosa, a 30 en 2021 por cuestiones religiosas, enfermedad, ideología (17), orientación sexual o racismo. En 2022 se ha reducido la cifra a seis por racismo, dos por ideología, una por antisemitismo y una por enfermedad. Son las últimas cifras de la Oficina Nacional contra los Delitos de Odio. «Que aumenten los delitos no es algo a lo que demos mucha importancia, que las cosas afloren no quiere decir que haya más sino que conocemos más», explicaba el comisario jefe de Policía Nacional de Burgos, Jesús María Nogales.
Remarcan la función de concienciación, información y educación como fórmula para frenar la discriminación por cuestión de etnia, religión, origen, orientación sexual, por edad o por enfermedad. «La gente se acerca más a denunciar conductas que hace años no se denunciaban, a preguntar qué pasa, no todo es delito de odio, pero si el sentimiento que no se puede tolerar, es lo que hay que sacar a la luz y luego ya tendrá el tratamiento administrativo, penal o judicial que corresponda», señaló Nogales.
Burgos
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En colaboración con la Fundación Círculo han organizado las primeras Jornadas Informativas sobre Delitos de Odio en la que han participado agentes de las brigadas provinciales de información de la Policía Nacional (grupos EVO) y la Jefatura de Información de la Guardia Civil y unidades periféricas (Grupo REDO). Los agentes, un centenar en total, han escuchado las aportaciones de seis profesionales de entidades sociales. La técnico de Igualdad de Trato y lucha contra la Discriminación de Fundación Secretariado Gitano, Selene de la Fuente, las técnicas de empleo de Cocemfe, Rosario García y Enma Ruiza, la fiscal delegada contra los delitos de odio de la Fiscalía de Burgos, Gemma Soledad, técnico de prevención de Proyecto Hombre, Marta Márquez, el activista Nuño Bol de Espacio Seguro LGTBIQA+ y la técnica de formación en el Proyecto Siracxen de ACCEM.
«Hay cosas que hace 20 años ni nos planteábamos que eran delito y para eso necesitamos comprender cuáles son las dinámicas de sensibilización que corresponden con las víctimas, como se ven, tenemos que aprender y entender su situación personal», explicó Nogales. Reconocen que «Burgos no es una sociedad odiadora» pero que «hay colectivos que están siendo atacados y hay que decir a los agresores que lo que hacen es un delito y a las víctimas que la administración tiene recursos para poder ayudarles, no se puede asumir como algo normal».
Esta jornada se enmarca dentro del II Plan de Acción contra los Delitos de Odio que ha impulsado la creación de grupos específicos en Policía Nacional y Guardia Civil y que han desarrollado 86 medidas para concienciar. «Los delitos de odio no son solo cuestión de etnias también de orientación sexual, religión... esto es multidisciplinar y debemos tratarlo desde diferentes prismas como la autocienciación, porque los discriminados no se dan cuenta de que lo son, la justicia restaurativa y la educación para prevenir», señaló el subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente.
Durante el encuentro, un centenar de agentes han conocido de primera mano «en unas sesiones abiertas a la intervención de todos» cuestiones como la realidad de la comunidad gitana con una ponencia analizando su historia, valores y buenas prácticas de la mano de la responsable de Fundación Secretariado Gitano. Sobre los delitos de odio en la discapacidad y el empleo han disertado las responsables de Cocemfe. La fiscal Gemma Soledad ha abordado el delito de odio desde la perspectiva del código penal mientras que desde Fundación Candeal se han planteado las labores de prevención y abordaje de los delitos de odio. El perfil de los delitos de odio por orientación sexual y el impacto de estas conductas en personas refugiadas, migrantes y racionalizadas se han expuesto desde Espacio Seguro y ACCEM.
Esta jornada informativa, la primera en llevarse a cabo, se plantea como «el arranque para hacer cosas más concretas» en el futuro. El subdelegado ha recordado que hace tres años se aprobó el II Plan de Acción contra Delitos de Odio con el que se han desarrollado 86 medidas para identificar y perseguir este tipo de delitos que, antes, no se tenían en cuenta. Se han puesto en marcha unidades específicas sobre estos delitos y sus víctimas porque «son hechos muy graves ya que afectan a los derechos fundamentales de las personas y no afecta solo a quien lo sufre sino que estigmatiza a todo el colectivo», puntualizó el Comisario de Policía Nacional en Burgos.
El II Plan de Acción contra los Delitos de Odio expira este año y ya se trabaja en la elaboración del tercero que estará en vigor de 2025 a 2027. «Se está afinando mucho y creo que la educación en entender la riqueza de la diversidad es fundamental», señaló De la Fuente.