El área de Mujer buscó asociaciones para abrir un punto violeta en el Parral

El área de Mujer de la Gerencia de Servicios Sociales buscó asociaciones para atender un punto violeta durante la fiesta del Parral, que este año se celebra en La Quinta. Envió una carta el pasado 30 de mayo con la intención de contar con este espacio preventivo de agresiones hacia la mujer y con la idea de retribuir a los voluntarios que prestasen el servicio.

Así lo ha dado a conocer Daniel de la Rosa, portavoz del grupo municipal socialista, para intentar contextualizar toda la polémica abierta en el bipartito de PP y Vox desde que el martes la concejala de Festejos, Carolina Álvarez, asegurase que en la zona de emergencias, en el aparcamiento de Las Veguillas, se contaría con un punto violeta, algo que desmintió su compañero de Vox, Ignacio Peña, responsable de Seguridad Ciudadana. Este edil de la formación verde dijo el miércoles que «no se acordó la colocación de un punto violeta», porque «se estimó que no era necesario su establecimiento».

Desde el punto de vista de De la Rosa ha habido «una descoordinación absoluta entre el propio Gobierno municipal» y pide que se mejore la comunicación para lograr que en las fiestas de San Pedro exista un punto violeta. «Señora Ballesteros coja el toro por los cuernos e impóngase. Yo entiendo que el señor Peña, concejal de Seguridad de Vox, no quiere saber nada de esto, si ha despachado como diciendo que a quién le interesan los puntos violeta», señala.

El concejal socialista manifiesta que una de las razones fundamentales de que no haya punto violeta es porque se actuó «tarde y mal» y la carta mencionada se envió un 30 de mayo, apenas 7 días antes de la cita festiva. Por tanto, las asociaciones no han podido conseguir con tiempo voluntarios para atender este puesto entre las 10.00 y las 22.00 horas, como se propuso desde Mujer. Además, la atención iba a estar retribuida, como se recoge en la misiva, a 30 euros la hora porque, como asegura De la Rosa, existen fondos del Gobierno central para este tipo de cuestiones.

La conclusión de toda esta «filfa», como la define el portavoz del PSOE, es que no habrá punto violeta en La Quinta, pero también la portavoz del equipo de Gobierno, Andrea Ballesteros, ha aportado su visión de este asunto ante las preguntas de la prensa. «No sé qué lío han tenido entre la concejala delegada de Festejos, el concejal de Seguridad y la concejala de Servicios Sociales, que se han desmentido uno al otro, así como un dominó, en 24 horas», afirma el líder de la oposición.

Por su parte, la presidenta de la Gerencia de Servicios Sociales y responsable del área de Mujer, Andrea Ballesteros, quiso cerrar el círculo de la controversia afirmando que se llegó a hablar y valorar con las asociaciones de Mujer, pero se decidió que no hubiera punto violeta como tal. «Cualquier mujer que se vea afectada por una situación de acoso o agresión podrá acudir a Protección Civil o la Policía Local o Nacional», indica.

El subdelegado del Gobierno discrepa

Sobre este asunto, el subdelegado del Gobierno, Pedro de la Fuente, ha mostrado su discrepancia «absoluta» de la decisión finalmente adoptada por el bipartito porque «las funciones de reacción no son las mismas que las de prevención». Según ha recordado, los puntos violenta resultan «fundamentales» para «crear conciencia» y su cometido no se limita exclusivamente a recoger el testimonio de posibles víctimas de agresiones sexuales.

«Son puntos preventivos que dan seguridad a las mujeres en los lugares en los que un borracho ha podido violentarlas o donde ha habido tocamientos», subrayaba De la Fuente, en presencia de la alcaldesa, Cristina Ayala, una vez concluida la Junta de Seguridad Local de cara al Curpillos y las fiestas de San Pedro y San Pablo. Asimismo, ha señalado que es «habitual» que los ayuntamientos habiliten este tipo de espacios en eventos multitudinarios.

Tampoco le parece de recibo al subdelegado que el equipo de Gobierno aduzca que «no hay asociaciones» feministas en la ciudad para gestionar los puntos violeta. De hecho, ha indicado que el Ayuntamiento tiene «capacidad más que suficiente» para afrontar este cometido con recursos propios, por no hablar del «tiempo sobrado» del que se ha dispuesto para su instalación. Teniendo además en cuenta la previsión de asistentes a la jira del Curpillos, considera que el paseo de La Quinta «admite perfectamente» dos puestos preventivos.