Tras el rastro de las ocupaciones más antiguas de Europa en Atapuerca

A falta de iniciar el grueso del trabajo en los 11 yacimientos que se abrirán en la 46 campaña de excavaciones de Atapuerca, lo avanzadilla ha empezado el trabajo de preparación de los yacimientos de Mirador, Elefante, parte más antigua de Gran Dolina y Cueva Fantasma. Este último, el yacimiento con la superficie más amplia y con una gran profundidad, será protagonista, con permiso de los fósiles humanos que aparezcan en Homo antecessor cuyo terreno vuelve a pisarse en superficie 30 años después de su descubrimiento. «Estamos ante una campaña muy prometedora», señalaban los codirectores en lo que supone ya un arranque de actividad científica que acercará a 300 investigadores en las próximas tres quincenas.

Cueva Fantasma es una gran superficie de excavación que, además, tiene una gran profundidad y muchas entradas de aporte de material alrededores que podrían ser en sí nuevos yacimientos de trabajo. Aunque ahora buscan en la parte más profunda del yacimiento y aportar datos fiables del gran debate de las primeras ocupaciones humanas en el continente europeo. «Iniciamos ahora un sondeo para los próximos cuatro o cinco años que nos permitirán saber qué son los sedimentos muy antiguos que hay bajo el conglomerado de retsos de Fantasma», explicó el codirector de las excavaciones de Atapuerca, Eudald Carbonell.

El objetivo es analizar y trabajar bien las zonas con antigüedades superiores a 1,4 millones de años. Estas están en la parte baja de Sima del Elefante, donde las dudas sobre las dataciones han vuelto a retrasar la publicación sobre Pink, la cara del primer europeo que apareció en 2022. «La humedad del yacimiento de Elefante ha generado muchas dudas y datos contradictorios entre los diferentes métodos de datación y estamos en esa discusión», explicó el codirector de las excavaciones de Atapuerca, José María Bermúdez de Castro.

También los niveles más bajos de Cueva Fantasma alcanzan esas edades tan antiguas en torno a 1,4 y 1,8 millones de años aunque ahora se excavan en extensión niveles de neandertales. Este espacio tiene 18 metros de profundidad con sedimento fértil y será, junto con Elefante, la clave para definir la población más remota de Atapuerca. «El detabe está ahora en la discontinuidad de ocupación en Europea en estás épocas tan antiguas, nosotros creemos que hay una ocupacion continua, tenemos restos de 1,4, 1,2 millones de años, y tenemos secuencia por debajo para debatir, algo que nadie tiene», especifico Carbonell.

En estos días un reducido grupo prepara y limpia los espacios de trabajo y se empieza a calibrar los sistemas digitales de gestión de la excavación pero también los logísticos. Mientras se espera hasta el 1 de julio para arrancar con todas las superficies de trabajo abiertas. Esperan hasta julio el yacimiento de Galería, el supermercado de los preneandertales de la Sierra de Atapuerca puesto que acudían allí a carroñear animales atrapados en la cavidad. 

También en julio arrancarán los trabajos en el complejo de Cueva Mayor: Portalón con restos de la Edad del Bronce y del Neolítico de «los primeros agricultores», la búsqueda «con muchas posibilidades de conocer la época neandertal» y la Sima de los Huesos que a los trabajos geológicos y de formación de la cueva y el rastro del acceso en la Sala de los Cíclopes se une, con especial intensidad, la extracción de fósiles humanos preneandertales. Ya son más de 7.000 los que se han alcanzado y «siempre excavamos fósiles humanos», añadía el codirector de Atapuerca, Juan Luis Arsuaga. 

Este verano, en la Universidad de Burgos, se realizará  un simposio para presentar un monográfico especial de la revista Anatomical Record sobre la colección de fósiles extraídos en la Sima de los Huesos. Un encuentro que, además, supondrá también un reconocimiento de los editores de la revista norteamericana de anatomía más antigua a los tres codirectores.

Pero esta es la campaña de Antecessor. El equipo no llegará hasta julio. Será un grupo de expertos en la excavación que ya han trabajado materiales de la especie, que cumple 30 años con el horizonte de ampliar la colección. «Volvemos a TD-6 con la posibilidad de encontrar más restos y con la seguridad de que este año arranca la segunda etapa de hallazgos que nos permitirá conocer mejor a antecessor», destacó Bermúdez de Castro durante la presentación del inicio de los trabajos de la 46 Campaña de Excavación de los Yacimientos de Atapuerca.