La plantilla de ITW inicia una protesta y amenaza con una huelga indefinida
La empresa incorporó un límite a la aplicación del convenio mientras se negocia el nuevo que disparó la respuesta sindical y espoleó un nuevo desencuentro entre patronal y trabajadores
El comité de empresa de ITW España, la antigua DUO Fast, inicia este lunes la primera de las cinco concentraciones que ha convocado en la planta de Burgos para esta semana en respuesta al último desencuentro surgido con la compañía en las negociaciones para alcanzar un acuerdo para el convenio colectivo.
Los trabajadores de esta empresa, que produce más de 5 millones de clavos al díade casi 200 modelos distintos para clavadoras para madera, ya amenazaron con una huelga indefinida a principios de año por la imposibilidad de llegar a un acuerdo con la dirección de la empresa, hasta el punto de que tuvo que mediar el Serla para reconducir las negociaciones. Ahora, de nuevo está sobre la mesa la amenaza de una huelga indefinida a partir de septiembre si la compañía no acepta los términos incialmente acordados con la representación sindical y que decidió modificar el mismo día en el que iban a ser rubricados por todas las partes.
La empresa decidió incorporar al texto del acuerdo una fecha límite de vigencia de ese pacto para admitir la ultraactividad del convenio para que no se extendiera más allá del último día del año 2016. De esta manera, la compañía marcaba de forma directa un límite temporal a la negociación del convenio para verla resuelta antes de que concluyera el año 2016.
Los representantes de los trabajadores, por su parte, reaccionaron en contra esta pretensión patronal de acotar la ultraactividad y, consecuentemente, forzar la negociación del convenio a un plazo de un año y medio y, después de que fuese rechazada en asamblea, comenzaron a planificar un calendario de protestas.
Según el relato de la representación sindical en la empresa, este plan de protestas llegó a oídos de la compañía que convocó al Comité de Empresa a una reunión extraordinaria a final de la semana pasada, en la que presentó a los representantes de los trabajadores un nuevo acuerdo para su firma, en el que «alteraba el contenido de lo ya pactado, eliminando el derecho al contrato relevo, algo sobre lo que ya había acuerdo», en palabras del presidente del comité de empresa, Ricardo Garrido. En un comunicado, denuncia, además, que al evitar que se aplicase la ultraactividad del nuevo pacto, lo que pretendía de facto la directiva es congelar las condiciones laborales en ITW Burgos «de forma indefinida». De hecho, los representantes del comité constatan que la problemática laboral se ha desatado en esta fábrica que opera en Burgos desde 1970 a partir de que fue absorbida por la empresa estadounidense ITW.
Perder derechos
Los sindicatos consideran que establecer una fecha límite de vigencia del acuerdo para la ultractividad significa que al llegar a ese punto el convenio prorrogado decaería y «los trabajadores perderían todos los derechos negociados».
Por tanto, el comité de empresa considera esta estrategia de la compañía como «una deslealtad y una falta de buena fe que ha venido a compliar complicado aún más la ya difícil relación entre ambas partes». De hecho, la negociación de un nuevo convenio o pacto que sustituyera al preexistente se inició con la dirección del grupo ITW en España hace más de un año, y esta última maniobra ha frustrado, a su juicio, «el esfuerzo por llegar a un acuerdo justo y duradero».
La plantilla se siente engañada después de más de 5 meses de unas negociaciones, cuyo comienzo se había retrasado desde el mes de enero de 2023, a petición de la dirección del grupo en Barcelona. Tras el principio de acuerdo al que llegó el comité de empresa y la dirección el pasado 13 de junio, el desencuentro entre ambas partes deja el pacto en el aire y a la plantilla abocada a un proceso de movilizaciones in crescendo que se inicia hoy lunes y que se prolongarán durante toda la semana a la puerta de la fábrica de 13 a 15h. Adicionalmente se añade una convocatoria de huelga indefinida en la planta de Burgos, a partir del 2 de septiembre próximo, si no se desbloquea el acuerdo.
El comité de empresa augura una asistencia masiva de trabajadores/as a estas concentraciones y prevé además la asistencia de representantes de los representantes sindicales de otras empresas que ya les han mostrado su apoyo, al tratarse de un conflicto que tiene similitudes, relatan los sindicatos, en algunas empresas asesoradas en la misma dirección, por parte de «los mismos profesionales, que quieren recortar derechos reconocidos en empresas con más de 50 años de actividad, como ocurrió hace un par de meses en la empresa Tacon Decor, y que a costa de la paz social, quieren cargarse un modelo de relaciones laborales que ha traído riqueza y productividad al tejido empresarial burgalés».