IU apelará al Gobierno para «impedir» que Burgos Este se llame José María Peña
El PSOE se pone de perfil y centra la crítica en que Ayala improvisó la medida «a bote pronto» mientras IU se acoge a la Ley de Memoria Democrática y lo llevará a la Secretaría de Estado
Funeral con honores de José María Peña en la iglesia de San Lesmes.
Las críticas de Izquierda Unida por el blanqueamiento del exalcalde de Burgos, José María Peña, a raíz de su fallecimiento van más allá del comunicado difundido este jueves en el que se pone en tela de juicio los «reconocimientos públicos» a alguien que fue inhabilitado durante 12 años «por corrupción y por favorecer el enriquecimiento ilícito de un constructor determinado a costa de un encarecimiento anormal de la vivienda». Para el coordinador provincial de la formación, Fernando Saiz, resulta especialmente doloso que la alcaldesa, Cristina Ayala, pretenda ahora que el polígono Burgos Este se rebautice con el nombre de un político vinculado al franquismo. Una propuesta «descabellada», a su juicio, que confrontaría con el cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática.
«Vamos a hacer todo lo que sea necesario para impedir esta situación», advierte Saiz, en declaraciones a este periódico, mientras enfatiza el rechazo de IU a «blanquear ciertos comportamientos que no podemos admitir». Frente a ese «revisionismo histórico», independientemente de las condolencias que su partido ha trasladado a los familiares de Peña, el primer paso será contactar con la Secretaría de Estado de Memoria Democrática para que tome cartas en el asunto.
Tampoco ve con buenos ojos el PSOE la ocurrencia de Ayala. Pero no por la estrecha relación de Peña con la dictadura ni por su condena tras el Caso de la Construcción. «No nos parece lo más adecuado», expone el portavoz municipal del grupo socialista en el Ayuntamiento capitalino, Daniel de la Rosa, pese a mostrarse partidario de que «un exalcalde pueda tener algún tipo de reconocimiento en un espacio público». El problema, ante todo, reside en que la regidora lanzó su propuesta «a bote pronto» sin consultarlo con nadie. O al menos con la oposición.
Fernando Saiz (Izquierda Unida) recuerda que en esta historia «había un corruptor y una serie de corrompidos»
El planteamiento del PSOE, que no comparte esa política de «hechos consumados», sería «darle una vuelta a este asunto» y consensuar, entre todos los partidos con representación municipal, un reconocimiento a Peña en nombre de la ciudad. Para ello, los socialistas hubiesen preferido que «en la comisión correspondiente se valorasen distintas propuestas alternativas» para «pensar cuál es el sitio más adecuado».
Desde IU, la postura del PSOE «sorprende parcialmente». Según Saiz, este «tono tibio e institucional» hacia la figura de Peña viene de lejos. En concreto, desde que se produjo un «acercamiento» entre los socialistas y Peña una vez cumplida su condena. No en vano, asegura que «en Burgos conocemos la trama y las consecuencias que ha tenido», empezando por el «encarecimiento anormal de la vivienda». Además, recuerda que en esta historia «había un corruptor y una serie de corrompidos».
El caso de Federico Sanz
A tenor de lo ocurrido tras la muerte de Peña, De la Rosa no puede evitar acordarse de su compañero de partido Federico Sanz, fallecido en noviembre del año pasado. Tan solo un mes después de su pérdida, el PSOE propuso en pleno que se habilitase algún espacio para rendir tributo al histórico diputado socialista, catedrático de Historia, decano en su día de la Facultad de Humanidades y «uno de los precursores, si no el que más, de que Burgos cuente con una universidad pública como es la UBU».
A pesar de que su «implicación política y social» y «una conducta que todo el mundo que le conoció puede definir como intachable», Ayala descartó la proposición sin pensárselo dos veces. Así las cosas, a De la Rosa y al resto de sus compañeros les hubiese gustado que el bipartito del PP y Vox hubiese actuado «con la misma agilidad que con José María Peña».