Diputación y Ayuntamiento convertirán a Burgos en la capital de la Ribera del Duero
Diputación y Ayuntamiento convertirán a Burgos en la capital de la Ribera del Duero al que también buscan unir a la Ribera del Arlanza. Se busca «aprovechar la marca del vino con la capital, gran receptora del turismo».
La Diputación Provincial de Burgos y el Ayuntamiento de la capital trabajan para convertir a la ciudad de Burgos en la capital de la Ribera del Duero. «El próximo consejo de la Denominación de Origen Ribera del Duero se celebrará en la Diputación Provincial para establecer en la ciudad la capital de la Ribera del Duero y el Ayuntamiento también está en ello», señaló el presidente de la Diputación Borja Suárez. En esa capitalidad se incluye también la Denominación de Origen del Arlanza.
Una estrategia que no pasa por retirar sedes ya asentadas en los territorios. «La sede de las denominaciones están bien donde están, y Aranda es la ciudad del vino y lo seguirá siendo», remarcó el presidente provincial. «Se trata de aprovechar la marca del vino con la de Burgos, puesto que la capital es la gran receptora del turismo y queremos fomentar esa relación con lo enológico como polo de promoción turística hacia la provincia y en torno al vino», explicó
Ribera
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Loreto Velázquez
Esta ubicación de la ciudad como «centro neurálgico de las denominaciones de origen» persigue también evidenciar el papel de Burgos en ambos sellos que, como el de Ribera del Duero, tiene un fuerte empuje internacional. «Debemos reivindicar que el 80% de la superficie de la Denominación Ribera del Duero y el 90% de la denominación Arlanza están en territorio burgalés».
Esta unión de sinergias en torno al vino coincide con el interés del Ayuntamiento de Burgos en desplegar en el antiguo Asador de Aranda, en pleno Camino de Santiago y junto a la Catedral de Burgos dos patrimonios de la humanidad rodeados de turistas de forma permanente ,en un centro enogastronómico.
El área de Turismo del Ayuntamiento de Burgos plantea invertir 780.000 euros en la reforma y equipamiento del mítico edificio y apuran los plazos para licitar este mes la redacción del proyecto que cuenta con 250.000 euros de fondos europeos para su desarrollo. El objetivo es que las obras de reforma empiecen en 2025. El objetivo de esta instalación es «estar a disposición de todos los profesionales del sector hostelero y de restauración, de sumilleres, enólogos, escuelas del ámbito de la alimentación con un edificio en el que puedan trabajar y exponer lo que hacen y lo que producen», señaló recientemente el edil de Turismo, Carlos Niño.
El reto de convertir a la ciudad de Burgos en un espacio de difusión de la riqueza enológica de la provincia no es nuevo. Con esa línea la Federación Provincial de Hostelería fue un gran defensor con el lanzamiento de Los Palacios del Vino dentro de la I Feria Internacional del Vino y el Duero International Wine Festival. Empezó en Burgos en septiembre de 2018 con el impulso decidido de la Junta de Castilla y León. El Ayuntamiento apoyó la iniciativa no como esperaban los hosteleros que apostaban por sentar la base de ese evento en la capital y, dado su carácter bianual, compaginar con la cita de ‘El alma de los vinos únicos’ de la Vinoteca El Lagar. No pudo ser. La cita se ha convertido en itinerante y ha celebrado dos ediciones más en Valladolid y Salamanca.