El Correo de Burgos

Larga vida al folclore castellano

El grupo de danzas Justo del Río celebra su 55 aniversario subiendo al escenario a la nueva generación de folcloristas. Dulzaro, las dulzainas de David Huerta y compañía y la Asociación Cultural Mecerreyes demostraron la fuerza del folclore castellano

El público llenó la plaza del Rey San Fernando para disfrutar del festival de la agrupacion Justo del Río en su 55 aniversario.

El público llenó la plaza del Rey San Fernando para disfrutar del festival de la agrupacion Justo del Río en su 55 aniversario.OSCAR CORCUERA

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Burgos

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Justo del Río fue un gran defensor del folclore burgalés. Después de entrar en el Orfeón Burgalés se encargó a partir de la década de los 40 de la grupo de danzas de la agrupación musical. Su trabajo en el conocimiento de las danzas castellanas y un mucho de su adaptación permitió recuperar el genuino folclore burgalés. En 1969 la agrupación de bailes regionales se transforma en el grupo de danzas Justo del Río. 

Los 55 años se han celebrado este año y en la tarde de ayer apostaron por la sabia nueva que trata de recuperar el folclore castellano, fusionando los sonidos de antaño con los ritmos electrónicos y permitiendo que una forma de expresión milenaria perviva con una nueva estética que garantiza una larga vida al folclore castellano.  

A los pies de la Catedral Dulzaro se convirtió en el otro protagonista de la noche. No defraudo su revisión de los ritmos castellanos de antaño con su Jota de Luna y otros sonidos tradicionales a otro ritmo. Otro de los artistas que están revolucionando el folclore castellano apuesta por el sonido puro de la dulzaina. David Huerta es uno de los mayores expertos en la ejecución de este instrumento milenario que trata de trasladar a los más jóvenes. 

Junto a ellos el escenario también contó con las escenografías de la Asociación Cultural Mecerreyes que mantienen vivo el mismo objetivo que tuvo Justo del Río y ha practicado en estos 55 años la Agrupación de danzas a la que da nombre: que no se pierdan las tradiciones castellanas, el sonido propio de los instrumentos de la tierra, los antruejos y la ropa tradicional castellana. Todos los elementos que han forjado una cultura milenaria de la que estar orgullosos. 

Qué mejor manera que celebrar los 55 años del grupo de danzas Justo del Río que con música castellana, baile y tradición, pero si además es por una buena causa mucho mejor. La otra razón de este concierto que aglutinó a apasionados por la tradición es la unión por la solidaridad y el concierto está dedicado a las asociaciones de Autismo Burgos y Elacyl a quienes se les dio visibilidad durante todo el evento.

Así, durante el mes de mayo, sacaron todo el poderío de la tradición burgalesa en un multitudinario desfile en el que participaron un centenar de personas en el que mostraron la variada y rica vestimenta tradicional, los sonidos de dulzainas, panderetas o la gaita de saco. Actividades con la que la Asociación Danzas Justo del Río busca celebrar sus 55 años de vida realizando un maridaje de sus propuestas con la ciudad.

 «Justo Del Río comenzó su trabajo hace 80 años y nosotros seguimos su estela hace 55, queríamos celebrar esa fecha de una manera diferente. con un espectáculo callejero, urbano, en homenaje a la ciudad que tanto nos ha apoyado nos ha dado», explica Javier Plaza Secretario de la Asociación. Y lo visto ayer en la Plaza del Rey San Fernando es un ejemplo de la tradición que demuestra la larga vida que tiene por delante el folclore castellano. 

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