El «aislamiento» de Burgos por tren penaliza la llegada del turista nacional

El turismo nacional sigue de capa caída en la provincia de Burgos. Este verano los hoteles han registrado un descenso del viajero nacional que «salvamos por el turista extranjero, llevamos años perdiendo viajeros nacionales», señala el portavoz de la Federación Provincial de Hostelería, Luis Mata.

Para el portavoz de los hoteleros de la provincia la situación de «aislamiento nos penaliza desde hace años». Remarca que los jóvenes que viven en grandes núcleos de población, que son el gran foco de captación de turismo hacia Burgos, apuestan por una movilidad distinta. «Ya no se mueven en coche, utilizan el transporte público, generalmente alta velocidad, y ahí Burgos pierde porque no hay ninguna conexión ni se la espera con el País Vasco, las rutas con Cataluña son muy pocas y malas y las que hay con Madrid no son atractivas en frecuencias ni en precio ni en tiempo», remarca Mata.

Así se pierde competitividad frente a otros destinos con una movilidad en tren de alta velocidad más atractivas. «Viajar desde Madrid a Valladolid, Segovia, Zamora, Salamanca o León es muy cómodo hoy en día y se llevan el turismo que podría venir a Burgos», según los hosteleros. Señalan que viajar de Madrid a Salamanca supone poco mas de hora y cuarto mientras que «a Burgos al pasar por Valladolid no ganas tiempo prácticamente».

Un buen agosto

Agosto refleja una importante caída de los viajeros en hoteles. De 76.855 viajeros nacionales el año pasado a los 74.352 registrados este mes. En cuanto a los extranjeros, el INE vuelve a marcar un descenso de 50.086 a 49.255. En pernoctaciones caen en el turista del país, de 128.290 en agosto de 2023 a los 114.745 de este año. Sube ligeramente en extranjeros: de 58.377 noches de 2023 a las 59.199 de este año.

«Agosto ha sido bueno, hemos remontado lo del año pasado que fue desastroso y poco tiene que ver nuestras estadísticas con las del INE que reflejan peores datos, no ha sido así». Los hosteleros apuntan que la estadística oficial es una proyección de los datos de una sola semana y si se registra un mal dato se traslada a todo el mes y viceversa. Por eso ellos elaboran su propio análisis en el que «las sensaciones son buenas, de una subida del 8%, recuperamos lo perdido en el agosto del año pasado que fue nefasto, gracias en especial al turismo extranjero», sentencia Mata.

Y es que al tirón que sigue teniendo el Camino de Santiago, los atractivos de los grandes reclamos como la Catedral, Atapuerca, el Monasterio de las Huelgas y la gastronomía, hay cambios sociales que empiezan a sumar. «Tenemos mucho turismo extranjero de personas de Bélgica, Inglaterra o Francia que atraviesa la península y este es un turismo potentísimo para nosotros», señalan. Estan de paso pero se quedan un día o dos.

De la misma manera que el turista nacional joven ya prescinde del coche para viajar y opta por conexiones rápidas como el AVE, la segunda generación que hace el viaje desde el norte de Europa a Marruecos, el conocido como Paso del Estrecho, también ha cambiado. «El marroquí que viene del norte de Europa ya no viene en coches destartalados que duermen en los parkings, ahora vienen con buenos coches y reserva habitación, es un cambio importante porque ha mejorado su poder adquisitivo y son un perfil importante para el turismo que pasa por la provincia porque nos beneficia por la ubicación», remarca Luis Mata.