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La descarga del provisional moverá la parada de bus de la plaza España

El Ayuntamiento abandona así la idea inicial de habilitar este punto junto al edificio Feygon, «porque crearía más trastorno». Desplaza unos metros, junto al río, la recogida de viajeros de las líneas 6, 11 y 23

Espacio que pasará a albergar la zona secundaria de carga y descarga del mercado provisional.TOMÁS ALONSO

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Burgos

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El segundo punto de carga y descarga del mercado provisional estará ubicado en la misma plaza España, en la acera próxima a las nuevas instalaciones. Así lo decidía finalmente el Ayuntamiento, tras analizar con detenimiento los pros y contras de las dos opciones sobre la mesa. Descarta de esta forma la posibilidad de habilitar este espacio para camiones y furgonetas en la avenida del Cid, número 10, en las plazas de aparcamiento junto al edificio Feygon, que era su idea inicial.

El concejal de Comercio, Raúl Martínez, daba cuenta ayer de la resolución que obligará a desplazar la parada de autobuses en la plaza España de las líneas 6, 11 y 23. Se moverá un puñado de metros nada más, hasta el tramo de glorieta pegado al río Vena, donde se erige la escultura de la carabela en homenaje a Juan de Garay.

Los trastornos que conllevaría la primera propuesta persuadían al equipo de Gobierno de tal ubicación, pues «obligaba a los vehículos a subir a una acera que tiene una gran afluencia de peatones, quizá no muchos a las ocho de la mañana, pero sí a las nueve», según indicó el edil, dada la cercanía de varios centros educativos. Así, esta circunstancia decantaba la balanza por el emplazamiento elegido, que, en todo caso, será complementario al muelle de carga y descarga principal previsto en la calle que desemboca de la plaza España a la avenida del Cid.

Martínez avanzó que la sección municipal de Tráfico ya trabaja en la señalización oportuna de la zona, para que este espacio pueda emplearse durante el traslado de los puestos al mercado provisional, que se abrirá al público el día 17 de octubre. El desplazamiento de la parada permanecerá en el tiempo mientras estén operativas las dependencias temporales, es decir, hasta que se construya y entre en funcionamiento el nuevo Mercado Norte.

Preguntado por la marcha de la mudanza, el concejal optaba por una expresión típica de los «pilotos de Fórmula 1»: «Los comerciantes están a fuego. Quedan pequeños detalles que se ultimarán este fin de semana».

Por otra parte, negaba la existencia de problemas de goteras en el edificio provisional. Recordó al respecto que a comienzos de verano una tromba saturó y rompió el soporte de uno de los canalones, lo que provocó que cayera agua dentro, «pero eso se ha solucionado». «Hemos añadido dos salidas de evacuación más en el canalón, de hecho, para que aunque llueva mucho responda con más agilidad», precisaba. Con todo, reconocía la aparición reciente de una balsa de agua «en las jardineras exteriores, pero no dentro».